16 Astutos que se saltaron las aburridas normas y se salieron con la suya

Historias
Hace 1 semana

Las personas que tienen un ingenio bien desarrollado son capaces de hacer frente a los problemas de la vida cotidiana. La mente ingeniosa acude al rescate cuando las soluciones estándar no funcionan. Tirar una puerta vieja y pesada, deshacerse de los molestos compañeros de viaje, recurrir a un truco ingenioso en una entrevista de trabajo y conseguir el puesto: la situación puede ser cualquiera.

  • A mi sobrino le gusta mucho el té de una cafetería de renombre, ignora el té casero, incluido el que hacemos especialmente para él, con un poco de azúcar. Así que, una día, mi madre compró vasos desechables de esta cafetería y ahora le sirve el té casero solo en ellos. Al final es bueno para todos. © ChloeMomo / Reddit
  • Un conocido estaba solicitando un trabajo como gerente. En la entrevista le pusieron una tarea: “Véndeme este bolígrafo”. Pero él tenía un truco genial para este caso: abrir el bolígrafo, meter 5 USD adentro y vendérselo al reclutador por un dólar. Lo trató de abrir girando de un lado a otro, cuando de repente el costoso Parker se rompió. La mesa se manchó de tinta y el candidato se quedó en silencioso horrorizado. Entonces, el jefe se echó a reír: “Bueno, ahora definitivamente tendré que comprarme un bolígrafo nuevo”. Así consiguió el trabajo.
  • Un compañero me pidió que lo ayudara a conseguir trabajo. Es un chico con mucho talento, y yo tenía muchas ganas de tenerlo en el equipo. Me puse en contacto con el departamento de RR. HH. y les hablé de él. El director me preguntó: “¿Tiene más experiencia que tú?”. Sí, es una pregunta capciosa. Si respondes “sí”, te despreciarán; si respondes “no”, te considerarán un egoísta repugnante, e incluso rechazarán a tu compañero. Así que decidí salirme de esa diciendo: “No suelo compararme con nadie. Pero mi amigo y yo nos complementamos y trabajamos bien en tándem”. Como resultado, lo contrataron. © Ankit Aggarwal / Quora
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  • Recogí a mi hija del kínder y se puso a llorar a pleno pulmón. Entre lágrimas me explicó: “Irene me ha dicho que nunca tendré una muñeca tan cool como la suya. No me la merezco”. Fuimos corriendo a una tienda y le compré la muñeca. Cuando llegamos a casa, mi hija estaba radiante y yo, orgulloso, se lo conté todo a mi esposa. Ella, estupefacta, me dijo que en el kínder no había ninguna niña que se llamara Irene...
  • Hacíamos un curso de autodescubrimiento en el trabajo. Todo tipo de pruebas y acertijos. El encargado trajo cajas voluminosas, las puso sobre la mesa y empezó a preguntar cuántos lados tenían. Alguien dijo 6, otro preguntó si la tapa de la caja estaba abierta. Yo sonreí y dije dos. Cuando me preguntaron “¿Por qué?”, respondí: “El de fuera y el de dentro”. Lástima que no supieran apreciar mi ingenio. © Accelerant_84 / Reddit
  • Me gustaría compartir un sencillo truco de vida. Cuando apago la cocina u otro electrodoméstico, lo digo en voz alta. Es muy útil porque me ayuda a recordar más tarde si lo hice o no. © PlasticRuester / Reddit
  • Una vez hice tacos en casa. Nos sentamos a comer, pero mi hijo de 4 años se negó a probarlos. Decidí ser astuta y le dije: “No, no te he hecho tacos. Prueba este sándwich mexicano”. Acabó comiendo lo mismo que nosotros. © Rhinomeat / Reddit
  • Mi gato ha aprendido a abrir la nevera. Por la noche, él y la gata se dieron un festín: comieron salchichas, paella y pollo. Al principio regañé a mi esposo, diciéndole que había cerrado mal la puerta de la nevera por la noche, pero luego pillé al gato con las patas en la masa cuando volvió a abrirla por la mañana para acabarse lo que quedaba. ¡Voy a colocar cerraduras en la nevera!
  • Cuando no quiero comunicarme con la gente en el transporte público o cafeterías, simplemente le digo en inglés: “Lo siento, no le entiendo”. Saco los auriculares, me los pongo y me dejan en paz. © Sylvie Son / Quora
  • Unos primos iban a visitarme todos juntos. Dijeron que estarían de paso en la ciudad y querrían quedarse a dormir. “Muy bien”, les dije. “Pero la nevera de casa está vacía, traigan un saco de papas y mucha carne. Para sí mismos, para mí y para mi Cenicienta”. Me preguntaron: “¿Quién diablos es esa?”. Les expliqué: “Es mi serpiente. ¡Una pitón real de tres metros de largo!”. Murmuraron algo y no volví a saber de ellos...
  • Mi esposo leyó en alguna parte que, cuando quieres comprar cualquier producto por Internet, solo hay que añadirlo a la cesta y no pedirlo. Y en ese caso, el vendedor debería enviar una oferta con descuento al cabo de un par de días. Eso es lo que ella hace siempre desde entonces. © inconclusivehush / Reddit
  • Mi abuelo tiene 84 años y su vecino, más de 90, pero está en sus cabales. Mi abuelo le preguntó cómo lo había conseguido. El vecino le contó un secreto: toda la vida se pone los calcetines y todos los zapatos primero en el pie izquierdo. “¿Y para qué sirve?”, preguntó el abuelo. “Es que siempre tienes que pensar en ello, ¡tu cerebro está siempre funcionando!”. Lo he intentado: no me sale, tengo demasiadas cosas en mi cabeza...
  • Si uno de mis compañeros demasiado sociables se queda mucho tiempo al lado de mi mesa y no me deja trabajar, simplemente me levanto, sigo charlando amistosamente y acompaño a la persona a su puesto de trabajo. ¡Funciona muy bien! © Karissa Lee / Quora
  • En el trabajo, cuando una discusión está en punto muerto, digo: “Creo que deberíamos consultar este tema con la almohada y volver a él en la próxima reunión con posiciones más preparadas”. Sobre todo si no tengo ninguna posición y no entiendo en absoluto de qué va la discusión.
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  • Un anciano se mudó a un departamento nuevo y encargó que le instalaran una puerta. Se la colocaron y se fueron dejando la vieja al lado. No la necesitaba, pero tampoco quería dejarla en la entrada. Sin embargo, no podía llevarla él solo. A la mañana siguiente la puerta ya no estaba. Y todo porque el astuto anciano tomó un rotulador y escribió en un papel: “No tiren la puerta, la recogeré más tarde”. La empujó hacia el elevador para que se viera mejor y se fue de compras. V2M8Ch / Pikabu
  • Convencí a todos los invitados, que a menudo vienen a mi casa, que es necesario lavar los platos enseguida (supuestamente para que nuestros hijos pequeños, viendo esto, también se acostumbren a recoger). Y que esta norma no debe romperse en ningún caso, porque los hijos, al ver los platos sin lavar, también dejan de limpiarlos, porque piensan que mamá tiene que fregarlos todos. Al principio hubo muchas preguntas de los invitados, pero luego todos empezaron a seguir esta regla. Ahora ya no tengo que fregar una montaña de platos cada vez... ¡Éxito!

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