Me parece muy rica la receta del pollo con crema de cacahuate
Cociné siguiendo las recetas de Jamie Oliver durante una semana y mi vida nunca volverá a ser la misma
¡Hola! Mi nombre es Natalia y me gusta cocinar. Me encanta preparar desayunos, almuerzos y cenas en casa, y también me gusta ver a chefs famosos hacerlo en sus programas. Por ejemplo, a Jamie Oliver. Pero nunca he intentado repetir sus platos, asumiendo que todavía no era lo suficientemente buena cocinando.
Especialmente para Genial.guru, decidí realizar un experimento y durante una semana cociné un plato al día siguiendo las recetas del programa Rápido y fácil con Jamie. Cada plato requiere un total de 5 ingredientes, excluyendo los productos auxiliares: aceite vegetal, vinagre, sal y pimienta.
Bollos con albóndigas
Ingredientes: pan de hamburguesa, carne molida fresca, queso mozzarella, salsa pesto y tomates en su propio jugo.
Preparación:
1. Toma 400 g de carne molida, agrega sal, pimienta y 4 cucharaditas de pesto.
2. Forma las albóndigas y fríelas a fuego medio en aceite de oliva durante unos 5 minutos, volteándolas de vez en cuando.
3. Agrégales un frasco de tomates en su propio jugo (400 g) y salmuera de una bolsa con mozzarella. Lleva a hervor.
4. Corta la mozzarella en rodajas y coloca una sobre cada albóndiga. Cubre la sartén con una tapa y cocina a fuego lento hasta que el queso se derrita.
5. Corta los bollos y dóralos un poco en una sartén.
6. Unta la mitad inferior de cada bollo con 1 cucharadita de pesto, coloca 3 o 4 albóndigas encima y cubre con la parte superior.
7. Sirve con la salsa de tomate restante.
Jamie cocinó estas hamburguesas en 21 minutos, pero a mí me tomó alrededor de 40. Esto se debe a que, como profesional, él realiza muchas acciones a la velocidad de un rayo. Por ejemplo, voltea magistralmente las albóndigas con un solo movimiento de la sartén. Yo tuve que hacerlo con una espátula tomando cada albóndiga por separado.
Me gustó la idea de que no sea necesario agregar un montón de ingredientes a la carne molida: huevos, cebollas o pan rallado. Las albóndigas no se desmoronaron durante la fritura y no perdieron su jugosidad. Y nunca hubiera imaginado que la salmuera de queso tuviera otro uso que no fuera ser desechado.
Mi catador personal valoró especialmente que hubiera mucha salsa para mojar los bollos antes de cada mordisco. Creo que es posible usar tranquilamente pasta de tomate normal o preparaciones caseras en lugar de los tomates italianos en su propio jugo. Pero no recomendaría quitar el pesto: con él, el sabor de las hamburguesas es realmente original.
Pollo con crema de cacahuate
Ingredientes: filete de pollo, crema de cacahuate, ají, lima, ajo
Preparación:
1. Toma la ralladura de 2 limas.
2. Toma 2 filetes y haz unos cortes pocos profundos en cada filete por un lado.
2. Rocía el pollo con aceite de oliva, espolvorea con sal y pimienta y la mitad de la ralladura.
3. Coloca los filetes del lado cortado en una sartén caliente. Fríe a fuego medio-alto.
4. Mezcla 2 cucharaditas de crema de cacahuate con jugo de 1,5 lima. Puedes agregar un poco de agua: la salsa debe quedar un poco líquida.
5. Agrega 4 dientes de ajo rallados y 2 o 3 chiles picados a la salsa. Revuelve.
6. Vierte la salsa sobre el pollo y llévalo al horno durante 6 minutos.
7. Rocía con aceite de oliva antes de servir y espolvorea con la ralladura restante.
Cuando Jamie sacó el pollo del horno, tenía una costra de salsa bien tostada. En mi caso, después de 6 minutos de asado, la pasta del filete aún estaba blanda, así que cociné el plato debajo del grill durante otros 10 minutos. Como resultado, el tiempo de cocción aumentó de 12 minutos a 22. No hace falta decir que había un poderoso aroma a cacahuate tostado por todo el departamento.
En cuanto a la forma de servir, fue un completo fracaso, como se puede ver en la foto. Pero las apariencias engañan. Nunca había probado un pollo así. ¡La crema de cacahuate, la ralladura de lima y el chile crean unos verdaderos fuegos artificiales de sabores! Pero tuve que comer este plato sola, porque en mi familia a nadie más le gusta la comida tan picante. Si decido volver a cocinar esta receta, pondré mucho menos chile.
Ensalada tibia con zanahorias y cereales
Ingredientes: zanahorias tiernas, granada, menta fresca, queso feta, mezcla precocida de cereales (cebada perlada, arroz, quinoa)
Preparación:
1. Fríe 350 g de zanahorias en aceite de oliva durante 15 minutos, revolviendo constantemente. Si las zanahorias son pequeñas, no es necesario picarlas.
2. Corta la granada en 2 mitades, exprime el jugo de una en un plato de ensalada. Agrega sal, un poco de aceite de oliva y vinagre rojo, ¡el aderezo está listo!
3. Toma un manojo de menta, corta los tallos y pica finamente las hojas.
4. Saltea la mezcla de cereales hervida (250 g) para que se evapore la humedad.
5. Agregar la menta, las zanahorias y los cereales al aderezo, mezclar.
6. Toma la otra mitad de la granada y agrega los granos sobre la ensalada.
7. Desmenuza a mano 40 g de queso feta y agrega a la ensalada.
El cocinero preparó la ensalada en 18 minutos. Sin embargo, Jamie usó una mezcla comprada en la tienda de cereales ya hervidos, mientras que yo tuve que preparar este ingrediente yo misma. Por lo tanto, tardé unos 40 minutos en preparar el plato.
Tenía grandes expectativas para la ensalada, porque la combinación de productos no es común y promete una “sorpresa” para los receptores gustativos. Pero me decepcionó: se puede comer, pero no puedo decir que sea muy sabrosa. Yo le discutiría a Jamie el hecho de que la ensalada se puede servir sola. Los catadores de mi casa dijeron que como guarnición tiene razón de ser, pero la menta lo estropea todo.
Gratinado de cerdo y queso
Ingredientes: solomillo de cerdo, papas, queso cheddar, prosciutto, salvia fresca
Preparación:
1. Cortar 800 g de papas en trozos grandes, cubrir con agua hirviendo y poner a fuego lento.
2. Espolvorear 400 g de solomillo de cerdo con una mezcla de sal y pimienta y sofreír en aceite de oliva a fuego alto durante unos 3 minutos, volteando de vez en cuando. Retirar de la sartén.
3. En el aceite en el que se frio la carne de cerdo, colocar la salvia por 1 minuto.
4. Rallar unos 40 g de queso cheddar.
5. Hacer puré de papas, sazonar con sal, añadir un poco de aceite de oliva y 20 g de queso cheddar. Puedes verter un poco de agua para “airear” la preparación.
6. Colocar el puré en una fuente para horno poner el cerdo en el medio. Espolvorear el queso restante sobre la masa de papa y llevar al horno por 10 minutos.
7. Colocar las rodajas de prosciutto alrededor de la carne, espolvorear con salvia y llevar de nuevo al horno por un par de minutos.
En ese día, esperaba invitados para cenar, así que decidí apostar por este plato. Usé un poco más de solomillo de cerdo y también reemplacé la salvia con romero fresco a falta de la primera en el mercado. Jamie aconseja no pelar las papas, y no lo hice, ya que había usado tubérculos jóvenes. Y esto fue lo que salió: ¡un plato genial! Mis invitados se comieron el gratinado de cerdo y papas hasta casi lamer los platos, y elogiaron especialmente el sabor a queso del gratinado, y también preguntaron por cuánto tiempo había marinado la carne para que quedara tan tierna. ¡Pero no tuve que marinar nada!
Jamie tardó media hora en preparar este plato, incluidos los 10 minutos de horneado. No especificó la temperatura, así que calenté el horno a 190 grados. Sabía que en mi horno el centro de la carne no se cocinaría en 10 minutos, además, había usado una cantidad mayor. Aumenté el tiempo de horneado por otros 10 minutos, y también tardé más cortando las verduras e hirviendo las papas. Me tomó unos 45 minutos cocinar este plato.
El prosciutto crujiente agrega un sabor italiano al plato, pero creo que es posible prescindir de él si la tarea es alimentar a la familia con una cena deliciosa y abundante sin lujos especiales.
Calamar frito con puré de aguacate
Ingredientes: calamar pelado, aguacate, harina integral, lima, salsa de ají
Preparación:
1. Vierte aceite vegetal en la sartén en una capa de aproximadamente 1 cm.
2. Corta 250 g de calamar en tiras de 2 cm de grosor, obtendrás unos aros.
3. Pasa los calamares por harina de modo que también cubra el interior de los aros.
4. Fríe durante unos 3 o 4 minutos, luego agrega sal.
5. Aplasta 1 aguacate con un tenedor hasta consistencia de puré, agrega la ralladura y el jugo de 1 lima. Condimenta con sal y pimienta.
6. Pon el puré en una fuente, coloca encima los aros de calamar, rocía con la salsa de ají y decora con una rodaja de lima.
7. Se come con las manos, mojando los aros en el puré de aguacate.
Jamie cocinó este plato durante 20 minutos, yo, alrededor de 27, porque dividí los calamares en 3 partes y freí cada una por separado por falta de una sartén grande. También cambié la harina integral por harina normal, lo que probablemente fue la razón por la que mis anillos no salieran dorados.
La idea de agregar el jugo de una lima entera al puré de aguacate me parece dudosa; de esta manera puede resultas bastante ácido y, tal vez, a alguien no le gustará ese sabor. Pero al combinarse con la salsa de chile, esta acidez queda bastante bien. Las impresiones generales del aperitivo fueron positivas: el calamar no quedó nada duro, la corteza era crujiente y el aguacate complementaba perfectamente el sabor del marisco.
Alitas de pollo pegajosas
Ingredientes: alitas de pollo, salsa teriyaki, ajonjolí, ají, cebolleta
Preparación:
1. Fríe 2 cucharadas de semillas de ajonjolí hasta que queden doradas. Ponlas en un plato.
2. Coloca en la misma sartén las alitas de pollo en una capa, fríe a fuego medio por cada lado durante aproximadamente 1 minuto.
3. Agrega 1 o 2 chiles sin semillas picadas y 4 cucharadas de salsa teriyaki. Agrega agua hervida hasta cubrir las alitas.
4. Cocina a fuego lento durante 30 a 40 minutos, volteando ocasionalmente el pollo.
5. Cuando el agua se haya evaporado y la salsa comience a chisporrotear, agrega 1 cucharada de vinagre. Evita que la teriyaki se pegue a la sartén.
6. Espolvorea las alitas terminadas con cebolleta finamente picada y semillas de ajonjolí tostadas.
Jamie tardó 46 minutos en hacer este plato. Yo lo cociné durante unos dos minutos más, ya que mi ojo no está tan entrenado para medir la cantidad correcta de la salsa y el ajonjolí sin usar una cucharada.
Todo salió como prometió el cocinero: carne tierna y corteza apetitosa. Mi catador devoró las alas en un abrir y cerrar de ojos y las felicitó generosamente. Volveré a cocinar más. Creo que la salsa teriyaki comprada se puede reemplazar por una versión casera simplificada. En la red puedes encontrar muchas recetas a base de salsa de soya, jengibre, miel y vinagre.
Galletas de chocolate de pan de centeno
Ingredientes: pan de centeno, chocolate amargo, mantequilla, huevos, azúcar.
Preparación:
1. Rompe una barra de chocolate (100 g) en trozos y llévalo a un baño María para que se derrita.
2. En un procesador de alimentos o licuadora, muela 100 g de pan hasta obtener migas. No es necesario quitar la corteza.
3. Agrega 2 huevos y 50 g de azúcar al pan picado y mezcla bien.
4. Agrega 100 g de mantequilla al chocolate y revuelve hasta que se derrita por completo.
5. Junta las mezclas de chocolate y pan, ponlas en una bolsa culinaria y exprime las futuras galletas en un papel para hornear engrasado con aceite de oliva.
6. Cocina en un horno precalentado a 200 grados durante unos 10 minutos.
7. Espolvorea ligeramente cada galleta con sal gruesa.
Nuestro chef favorito tardó 28 minutos; yo, unos 40. Él horneó 2 bandejas de galletas al mismo tiempo, y yo lo hice en 2 etapas. Esta es quizás la receta más fácil en términos de disponibilidad de ingredientes, porque puedes comprarlos en cualquier supermercado. Y la preparación en sí no es nada difícil.
Mientras las galletas estaban en el horno, hubo un inimaginable aroma a chocolate en la cocina. Jamie también prometió que usar pan en lugar de harina garantizaría un centro suave. Y tenía razón: las galletas tenían un “interior” tierno y una corteza crujiente. Y la sal realza el sabor del chocolate.
Definitivamente volveré a cocinarlas, porque esta receta es una excelente manera de darle una segunda vida a los restos rancios del pan de centeno y de complacer a la familia con un delicioso postre para el té.
Las conclusiones que hice
1. Las recetas resultaron funcionar. 7 platos preparados siguiéndolas fueron consumidos hasta la última miga. Sí, la ensalada tibia con zanahorias me gustó menos que los demás platos, pero tampoco tuve que tirarla.
2. Jamie prometió preparación fácil y cumplió su palabra. En todos los casos, el proceso no supuso ninguna dificultad, aunque estoy lejos de ser una cocinera experimentada.
3. En cuanto a la velocidad, aquí mi chef favorito hace trampa. Porque no todo el mundo puede realizar las operaciones tan rápido como él. Además, no todos tienen en casa los equipos necesarios para realizar varias tareas simultáneamente.
4. Casi todas las recetas contienen ingredientes que es posible que no se encuentren en un supermercado cercano a tu casa. Para repetir el plato de Jamie exactamente, tal vez haya que recorrer mercados o tiendas, o realizar un pedido en línea. Por ejemplo, para conseguir crema de cacahuate o prosciutto.
5. Jamie me enseñó a mirar las sobras de manera un poco diferente: la salmuera de queso o el pan duro puede servir para algo. Y la cáscara de papa no estropea en absoluto el puré de papas, sino que, tal vez, incluso lo mejora.
¿Has cocinado alguna vez siguiendo las recetas de chefs famosos? Si es así, ¿cómo te fue?
Comentarios
Me encantaría probar las galletas de chocolate de pan de centeno
Me encantan las recetas de Jamie Oliver