Juan Soler más enamorado que nunca le dedica bellas palabras a su novia: “Es la mujer que nunca tuve”

El amor a menudo nos sorprende cuando menos lo esperamos. Después de una ruptura o desilusión, el corazón puede parecer cerrado a nuevas posibilidades, pero, como un giro inesperado en una trama, el amor tiene la habilidad única de reaparecer en los momentos menos previstos. Es como si el universo, con su propio guion romántico, nos recordara que siempre hay espacio para una nueva historia, como en el caso de Juan Soler.

Han transcurrido cinco años desde que Juan Soler y Maky Moguilevsky anunciaron su separación oficial. En la actualidad, Juan sostiene una relación sólida con Paulina Mercado, quien recientemente compartió la noticia de que enfrenta un tumor cerebral. A punto de celebrar su primer aniversario como pareja, el actor confiesa que Paulina es la persona por la que estuvo esperando todo este tiempo.

La noche del 28 de noviembre, Juan Soler y Paulina Mercado asistieron al estreno de la obra de teatro ‘Las mujeres son de venus y los hombres ¡ni madres!’. Durante el evento, compartieron sus sentimientos al contar el uno con el otro. Juan, de 57 años, no dudó en hacer una confesión significativa. “Es un regalo de la vida. Lo mejor del 2023 es haber afianzado mi relación con Paulina y descubierto a este ser humano maravilloso que sé que me va a acompañar por el resto de mis días”, expresó. “Veo su fortaleza, su entereza y entrega, la generosidad que tiene, y es la mujer que siempre soñé y que nunca tuve”, afirmó.

Ella reveló en su aparición en el programa Montse & Joe que su relación con el argentino se desarrolló después de un largo periodo de ser “muy amigos”. “Estoy feliz, emocionada. Me estoy dando la oportunidad porque, además de todo, ha sido maravilloso; fue una sorpresa”, comentó. En ese momento, Soler ya llevaba aproximadamente cuatro años separado de Maky Moguilevsky, con quien tuvo a sus dos hijas, Mía y Azul.

Juan Soler y Paulina Mercado han mostrado que, a pesar de las dificultades, el amor puede ganar. Su conexión, cimentada en la amistad y la sorpresa, es un recordatorio de que, a veces, lo inesperado puede resultar en algo hermoso. En cada momento compartido, celebran el triunfo de la resiliencia y la capacidad de encontrar la felicidad, incluso después de los desafíos.