No sabía mucho de la historia de esta mujer
La historia de la “Dama de hierro fashion”, Anna Wintour, que fue el prototipo de la dura jefa de la película “El diablo viste a la moda”
Antes del estreno de la película El diablo viste a la moda, el nombre Anna Wintour ya era conocido entre las personas del mundo de la moda. Pero después de que se supo que, en muchos aspectos, la imagen de Miranda Priestly fue basada en Wintour, millones de personas supieron sobre la principal editora de la revista Vogue, que tiene un estilo de liderazgo duro. Sin embargo, una película es una película, y en la vida todo es mucho más interesante. Anna es reconocida como una de las figuras más influyentes del mundo de la moda moderna. Es famosa por su estilo impecable, profesionalismo absoluto e infalible perfeccionismo.
Dado que hay rumores más increíbles alrededor del nombre Anna, Genial.guru decidió descubrir quién es Anna Wintour en realidad, y por qué recibió el apodo de Invierno Nuclear.
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Anna nació en Londres en 1949. Su padre era editor de un periódico, y su madre se dedicaba a actividades sociales. Por cierto, Anna Wintour pertenece a un linaje noble: su abuela por la línea paterna es una tataranieta de la famosa novelista del siglo XVIII, Lady Elizabeth Foster, duquesa de Devonshire.
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Durante sus estudios en la escuela, Anna a menudo protestaba contra el código de vestimenta, y no quería usar un uniforme escolar. Por ejemplo, ella amaba las faldas cortas y cortaba el dobladillo de las suyas. A la edad de 14 años también se hizo un corte de pelo de bob, que es parte de su imagen hasta el día de hoy. Es decir, Wintour prácticamente no cambió su peinado durante 58 años.
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Su padre le inculcó el interés en la moda desde la infancia. Anna dijo: “Creo que él realmente decidió por mí que yo debería trabajar en la moda”. Cuando Anna tenía 15 años, su padre le consiguió trabajo en la famosa tienda de moda Biba, en la que la regla principal sonaba así: “Nunca ofrezcas ayuda a los compradores”.
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A los 15 años, Anna comenzó a comunicarse y hacer amigos con jóvenes mayores y con conexiones. Por ejemplo, se convirtió en amiga del famoso escritor Piers Paul Read, que tenía 24 años, y luego se hizo amiga del popular columnista Nigel Dempster.
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A los 16 años, la joven decidió no entrar en la universidad, sino dedicarse al periodismo de moda. Por insistencia de sus padres, comenzó a estudiar en la más grande tienda departamental de moda del mundo, Harrods, y también participó en cursos, pero pronto abandonó sus estudios con las palabras: “O entiendes de moda, o no”. Pronto, uno de los amigos de Anna le dio trabajo en su propia revista. Este fue el comienzo de una carrera brillante.
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Por un tiempo, la joven trabajó en las editoriales de las revistas de moda en Londres, aplicando una variedad de enfoques innovadores en la presentación de materiales, pero en algún momento decidió irse de Inglaterra y se trasladó a Nueva York.
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Pronto, Wintour se convirtió en editora junior del departamento de moda en Harper’s Bazaar. Aunque sus ideas innovadoras en materia de fotografías de un formato nuevo en la revista llevaron a que el editor principal despidiera a la joven 9 meses después.
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Al mismo tiempo, se extendió el rumor de que Anna había sido presentada a Bob Marley y que ambos habían desaparecido juntos durante toda una semana. Sin embargo, en 2017, en una entrevista, Wintour dijo que en realidad nunca conoció al legendario músico.
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Anna se convirtió en una de las primeras editoras que comenzaron a invitar a estrellas a aparecer en las tapas de la revista. Se dio cuenta de que eso aumentaba las ventas. Más tarde, esta tendencia fue seguida por casi todos los editores.
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Wintour siempre había soñado con conseguir un trabajo en la revista Vogue. Una vez, un ex colega suyo le organizó una entrevista con la editora en jefe de Vogue, Grace Mirabella, pero la conversación terminó después de que Wintour le dijera a Grace que quería ocupar su lugar.
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Finalmente, Anna de todos modos logró comenzar a trabajar en Vogue. El director de la editorial de esta revista estaba impresionado con la efectividad de su trabajo anterior y le ofreció el puesto de Directora Creativa de Vogue en Norteamérica. Wintour aceptó la propuesta exigiendo la duplicación de su salario y una plena libertad de acción.
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Ella creía que la revista se había vuelto aburrida y desactualizada, así que comenzó a cambiar activamente su concepto. Anna no consultaba muchas de sus órdenes con la editora en jefe, y esto inevitablemente llevaba a las fricciones entre los empleados. Para evitar conflictos más graves, la gestión de la editorial decidió nombrar a Wintour editora en jefe de Vogue británica, y ella regresó a Londres.
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En su nuevo puesto cambió de inmediato a muchos empleados y demostró un nuevo y bastante duro estilo de administración. Fue entonces cuando obtuvo el apodo Nuclear Wintour, es decir Invierno Nuclear: debido a la consonancia de su apellido con la palabra invierno (winter).
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Después de 10 meses, Wintour encabezó la Vogue estadounidense, porque con la editora anterior la revista comenzó a perder posiciones frente la recién lanzada revista Elle. Lo primero que Anna decidió cambiar fue el estilo de las portadas. Antes en ellas había modelos en ropa costosa, posando en estudios especiales. Wintour decidió que era mejor hacer fotografías en la calle, así como invitar a modelos menos conocidos para trabajar. Además, propuso mezclar ropa de diseñador con prendas económicas.
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Como resultado, la portada del primer número del que Wintour fue responsable se convirtió en revolucionario para 1988. En ella había una fotografía de la modelo de 19 años Michaela Bercu, en unos pantalones vaqueros descoloridos de tiro bajo de 50 USD y una chaqueta de Christian Lacroix decorada con pedrería de gran tamaño, de 10 mil USD. Por cierto, era la primera vez que una modelo de una portada de Vogue estaba en jeans. Originalmente se suponía que Michaela se pondría una falda, pero la joven había subido un poco de peso debido a su embarazo, por lo que la falda no le quedó bien.
- Años más tarde, Anna reconoció que la foto llegó a la portada casi por casualidad: “Solo dije: ‘Bueno, intentémoslo’. Y lo hicimos. Fue muy natural. Para mí, simplemente significaba: ’Esto es algo nuevo. Esto es algo distinto’. Y más tarde llamaron de la imprenta para asegurarse de que era realmente la foto para la portada, ya que pensaban que se había cometido un error”. Más tarde Wintour dijo que si tuviera que elegir su mejor portada, sería precisamente esta.
- Anna entendió perfectamente las nuevas solicitudes de los lectores. Ella decía: “Aparecieron nuevos tipos de mujeres. Están interesadas en negocios y en el dinero. Ya no tienen tiempo para las compras. Quieren saber qué, por qué, dónde y cómo”.
- A pesar de un horario de trabajo frenético, Anna no se olvidó de su vida personal. En 1984 se casó con el profesor de la psiquiatría infantil David Shaffer. Pronto, la pareja tuvo dos hijos, Charles y Bee. El hijo se graduó de la Universidad de Oxford y se convirtió en médico. La hija se graduó de la Universidad de Columbia, y escribió columnas para The Daily Telegraph. En 2018, se casó con el director italiano Francesco Carrozzini, hijo del editor en jefe de Vogue de Italia.
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En 1999 Wintour se divorció de su marido. Los periódicos aseguraban que la causa del divorcio fue su relación con el inversionista Shelby Bryan. La propia Anna no emitió comentarios. Pero sus amigos señalaron que su nueva pareja suavizó el carácter de la dama de hierro. “Ahora ella sonríe y a veces incluso se ríe”, dijo a la prensa uno de los amigos de Wintour.
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Con los años, Wintour comenzó a ser considerada una de las personas más influyentes del mundo de la moda, una persona que iniciaba tendencias y descubría nombres nuevos. The Guardian incluso la llamó el “alcalde no oficial de Nueva York”. Ella les recomendaba encarecidamente a las casas de moda que contrataran diseñadores más jóvenes. Por ejemplo, gracias a ella, John Galliano comenzó a trabajar en la casa de moda Christian Dior. Además, hace poco convenció a Brooks Brothers a contratar al no tan famoso diseñador Tom Brown.
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Se informó que en 2005 su salario fue de 2 millones USD por año. Además, tenía privilegios como un automóvil Mercedes-Benz Clase S con un conductor (tanto en Nueva York como en el extranjero), subsidio en efectivo para compras de 200 mil USD y una suite en el hotel Ritz Paris, que Anna ocupó durante la visita a los desfiles de moda europeos. Además, el presidente de la editorial le dio instrucciones a la compañía de que le proporcionaran un préstamo sin interés por un monto de 1,6 millones USD para comprar un inmueble.
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Wintour tienen una rutina diaria bastante estricta. Trata de despertarse andes de las 6 de la mañana, juega al tenis y llega temprano a la oficina de Vogue. Anna siempre llega a los espectáculos de moda mucho antes de su inicio. Según la serie documental de la BBC “Mujer jefe”, rara vez se queda en las fiestas de más de 20 minutos, porque todos los días se va a dormir a las 22:15.
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Se dice que tiene 3 asistentes permanentes, pero a veces sorprende a las personas, contestando las llamadas telefónicas ella misma. Al mismo tiempo, Anna a menudo apaga su teléfono móvil para almorzar tranquilamente. Por lo general, prefiere alimentos altos en proteína, como un bistec, una hamburguesa sin pan, salmón ahumado, huevos fritos.
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Por supuesto, debido a la alta posición de Wintour, su guardarropa a menudo está sujeto a un análisis cuidadoso. A principios de su carrera, le encantaba combinar camisetas y chaquetas de moda con jeans de diseño. Más tarde, su ropa favorita fueron trajes de Chanel con mini faldas.
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Anna es más conservadora en la elección de los zapatos: desde 1994 prefiere los zapatos de Manolo Blahnik con dos correas que se cruzan en la parte delantera y una correa en la parte de atrás. Los zapatos se hacen a medida, para que se adapten perfectamente a la forma del pie de Wintour. El diseñador fabrica sus zapatos en dos tonos claros, que combinan armoniosamente con el tono de la piel de la exigente clienta.
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Más de una vez Anna se convirtió en el objetivo de las organizaciones de defensa de los derechos de los animales, ya que le encanta la piel natural y a menudo usa productos de piel para las fotos de moda en Vogue. Según uno de los empleados de Vogue, “nadie usaba piel hasta que ella la colocó en una portada a principios de la década de 1990. Ella encendió toda la industria”.
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Uno de los accesorios indispensables de Wintour son sus grandes lentes de sol. Muchas personas piensan que los lentes oscuros son parte de su imagen dura, y que Anna, por así decirlo, se esconde detrás de ellos como si fuera una armadura. Pero en realidad Anna simplemente ve mal, y hay unos cristales correctivos incorporados en el armazón.
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A pesar de que en 2013 Wintour se incluyó en la lista de The Guardian como “una de las 50 personas mayores de 50 años mejores vestidas”, también tuvo fracasos fashion. Así, en 2008 apareció en un evento secular en un vestido de Karl Lagerfeld, que fue llamado “el peor fracaso de la moda del año”. Los críticos señalaron que el vestido hizo que Wintour se viera como la heroína de la fantástica película de David Lynch, Dunas. Alguien dijo que “se veía como si hubiera sido incrustada por fósiles”.
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Anna Wintour se hizo mundialmente famosa después de la publicación del libro El diablo viste a la moda, que fue escrito por su ex ayudante Lauren Weisberger. En la novela, el personaje de Miranda Priestly tiene mucho en común con Wintour: también es británica, tiene dos hijos, tiene un liderazgo duro y le encanta encargar a sus subordinados tareas difíciles y luego regañarlos por incumplimiento. Aunque la autora afirmó que no solo se había basado en su propia experiencia en el mundo de la moda, sino también en la experiencia de sus amigos.
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La propia Wintour no comentó particularmente el libro, diciendo que “Me gustan las obras de arte excelentes. Todavía no he decidido si leeré eso o no”. Después del éxito del libro se decidió filmar una película basada en él. Hubo rumores de que, durante la filmación, Anna aconsejaba encarecidamente a las personas conocidas del mundo de la moda y a los diseñadores que no aparecieran en la película, de lo contrario Vogue no escribiría sobre ellos. Sin embargo, más tarde Wintour lo negó.
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La película fue estrenada en 2006 y tuvo un gran éxito. Wintour llegó al estreno en un traje de Prada, demostrando un excelente sentido del humor. Es curioso que la oficina cinematográfica de Miranda se veía muy parecida a la oficina de Wintour, por lo que de Anna pronto decidió refaccionarla. Al mismo tiempo, señaló que la película le pareció “realmente interesante”, y la elogió por mostrar la moda como algo “emocionante y glamoroso”.
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Muchas veces Wintour es descrita como una mujer emocionalmente moderada que se comporta bastante fríamente incluso con sus amigos. Alguien de la prensa dijo que “en una etapa determinada de su carrera, Anna Wintour dejó de ser Anna Wintour y se convirtió en ’Anna Wintour’”. Es decir, cerró de la mayor parte de su personalidad y se convirtió en una marca. Sin embargo, es posible que la frialdad de Wintour sea simplemente una manifestación de la tradicional moderación británica.
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También ha sido criticada la tendencia de Wintour de tratar de moldear a todos quienes la rodean según sus propios estándares. Por ejemplo, en 2005, el director creativo de Vogue, André Leon Talley, dijo en el programa de Oprah Winfrey, que en algún momento Anna le exigió que perdiera peso. “La mayoría de las chicas de Vogue son tan delgadas, increíblemente delgadas”, dijo, “porque a miss Anna no le gustan las personas rellenas”.
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Una vez, en la Semana de la Moda de Milán, Anna pidió que los desfiles clave se movieran a principios de la semana para que ella y otros editores estadounidenses tuvieran tiempo de regresar a casa antes del desfile de París. Como resultado, muchos quedaron descontentos, porque algunos diseñadores jóvenes, que debían mostrar sus colecciones hacia el final, se quedaron sin una parte importante de la audiencia. Dolce & Gabbana en ese momento declaró que Milán se estaba convirtiendo en un “circo sin sentido”.
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Hoy, la legendaria Anna Wintour tiene 71 años, y, a pesar de toda la crítica, construyó una carrera realmente brillante: lleva encabezando de manera ininterrumpida la revista Vogue desde 1988. Cuando se le pidió a Anna que comentara sobre su estilo duro de liderazgo, las numerosas quejas de los empleados y su carácter difícil, ella respondió: “Tengo muchas personas aquí que trabajaban conmigo desde hace 15, 20 años. Y, sabes, si soy tan mala, entonces deben de ser masoquistas, porque todavía están aquí. Si a veces le parezco a alguien fría o demasiado directa, es solo porque me esfuerzo por llegar siempre a lo mejor”. Su amigo, el diseñador Karl Lagerfeld, una vez dijo sobre ella: “Ella es honesta. Te dice lo que piensa. ’Sí’ es sí, y ’No’ es no”.
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Anna Wintour se dedica activamente a la caridad. Es patrocinadora del Museo Metropolitano de Arte en Nueva York, donde organizó fondos caritativos para el Instituto de Disfraces. También creó una fundación para apoyar y promover a jóvenes diseñadores de moda. Además, logró recolectar más de 10 millones USD para las organizaciones de caridad que luchan contra el SIDA.
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Cuando, en 2011, la revista Forbes la puso en el lugar 69 en su lista de las 100 mujeres más influyentes del mundo, Anna destacó que no se consideraba una persona influyente. Y también dijo: “¿Sabes lo que significa? Significa que obtienes los mejores lugares en los restaurantes o entradas para diferentes eventos. Pero también es una excelente oportunidad para ayudar a otros, y por eso estoy extremadamente agradecida”.
¿Has visto la película El diablo viste a la moda? En tu opinión, ¿la imagen de Anna Wintour es más bien positiva o negativa?
Comentarios
No tenía ni idea de que no tenía estudios