Le recordé a mi amiga que ella es pobre y yo no y se puso como loca
Imagina tener una vida universitaria donde no solo tienes que lidiar con exámenes y trabajos, sino también con una amiga que parece estar obsesionada con cómo manejas tu lavandería. Eso es lo que le sucede a una estudiante de 20 años que se encuentra en una encrucijada entre mantener la paz o ponerle un alto a los comentarios constantes y no deseados de su amiga.
“Estoy (20F) inscrita en el programa de lavandería de la escuela, donde pago una suma global y ellos hacen mi lavandería durante todo el año. Es muy popular en mi universidad, y recogen la ropa de mi dormitorio cada semana.
Mi amiga (21F) está extrañamente obsesionada con esto y constantemente comenta al respecto por alguna razón. Siempre viene a mi habitación, ve mi bolsa y tiene algún comentario al azar para decir.”
“Ella dirá: ’¿Cómo podría alguien pagar por eso?’ A lo que yo siempre respondo: ’¿Por qué haría algo que no quiero, si puedo simplemente pagarle a alguien más para que lo haga por mí?’
Me pregunto si es así con todos, porque eso explicaría por qué tiene pocos amigos. Casi todos los que conozco usan el programa de lavandería. Sus comentarios no deseados hacen que me guste menos.”
“Lo hizo de nuevo, y dijo: ’Qué desperdicio de dinero. El programa de lavandería es ridículamente caro, y nadie puede permitírselo.’ Simplemente, le dije que no me parece caro en absoluto, y que ella lo encuentra caro porque es pobre. Yo no lo soy, así que seguiré pagando por el programa.
Ella está furiosa porque la llamé pobre. Pero lo es. Es simplemente un hecho. ¿Soy la mala?”
Hay cosas, frases y palabras que por más que se digan sin una supuesta mala intención, nunca caen bien. Por eso y para evitar futuras situaciones como la anterior, en Genial.guru, hemos querido recopilar varios consejos:
- Practica la empatía: Antes de responder a comentarios molestos, intenta ponerte en los zapatos de la otra persona. Puede que estén proyectando sus propias inseguridades o experiencias. Aunque no justifica su comportamiento, entender su perspectiva te ayudará a responder de manera más comprensiva.
- Establece límites con asertividad: Si los comentarios de alguien te incomodan, es importante establecer límites de manera clara y respetuosa. Puedes decir algo como: “Entiendo que tienes una opinión diferente, pero me gustaría que evitáramos este tema”. Esto establece un límite sin generar conflicto.
- No tomes las críticas de forma personal: Recuerda que no todas las críticas son ataques personales. A veces, la gente comenta sin pensar en cómo sus palabras pueden afectarte. Trata de no tomártelo a pecho y sigue haciendo lo que te hace sentir bien.
- Evita respuestas despectivas: Aunque te sientas molesto por los comentarios de otra persona, evita responder con insultos o comentarios que puedan herir. Responder con calma y sin desdén puede evitar que la situación se escale y mantendrá la conversación en un tono respetuoso.
- Desvía la conversación: Si una conversación se vuelve incómoda o repetitiva, trata de cambiar el tema para evitar conflictos. Por ejemplo, puedes decir: “Hablando de eso, ¿qué opinas de [otro tema]?”, para redirigir la conversación hacia algo más positivo o neutral.
- Considera hablar en privado: Si el comportamiento de la otra persona persiste y te afecta, es buena idea tener una conversación privada y honesta con ella. Explica cómo te hacen sentir sus comentarios y pide respeto hacia tus decisiones. Esto puede resolver el problema sin la presión de otras personas alrededor.
- Refuerza tu autoestima: Mantente firme en tus decisiones y no permitas que los juicios de otros afecten tu autovaloración. Recuerda que tienes derecho a vivir tu vida de la manera que te haga sentir más cómodo, y que nadie debería hacerte dudar de eso.
- Rodéate de personas que te apoyen: Mantén cerca a personas que respeten y apoyen tus decisiones. Las amistades saludables se basan en el respeto mutuo, incluso cuando hay desacuerdos, y te proporcionan un entorno positivo.