15 Personas recordaron las experiencias más bochornosas que tuvieron en un empleo

Una mujer se fue de vacaciones con su esposo y el amigo de este. Los primeros días de viaje se echaron a perder por una discusión. Y todo porque a la protagonista de esta historia le bajó la regla. Como no llegaban a un acuerdo, pidieron a Internet su opinión sobre el asunto. Sin embargo, la divergencia de opiniones de los usuarios fue tan grande que los administradores tuvieron que cerrar los comentarios.
Todo empezó cuando la mujer, su esposo de 30 años y un amigo de este, también de 30 años, se fueron de vacaciones juntos. El grupo alquiló un departamento para compartir su estancia. Fue entonces cuando a la joven le bajó la regla y compró toallas femeninas.
“Las dejé en la encimera del baño en una bolsa translúcida donde ni siquiera se veían. Sin embargo, a mi esposo le pareció inapropiado”, explica la chica. Vale la pena señalar que estamos hablando de un producto de higiene envasado y sin usar.
El joven le dijo a su esposa: “A mi amigo no le gustará verlas y saber que esto ocurre en el departamento”. La mujer objetó: “La menstruación es un proceso natural y no debe considerarse grosero o sucio. Nadie debería avergonzar a las mujeres por ello”.
“Siguiendo su lógica, le sugerí a mi esposo que escondiera todo el papel higiénico de la casa, porque... ¡puaj!”, añadió la protagonista. Pero su marido guardó silencio, así que la chica empezó a dudar de sí misma después de aquello: “Aún me pregunto si me equivoqué al dejar las toallas femeninas en el baño. ¿Debería esconderlas a mi esposo y a su amigo?”.
Muchos usuarios defendieron a la mujer. Y no faltaron comentarios burlándose de la situación:
Después de leer esto, el hombre dijo: “Por supuesto que las chicas comentaristas se pondrán del lado de mi esposa por solidaridad femenina”. Entonces respondieron los hombres:
Las mujeres se enfadaron mucho por lo que dijo el marido de la protagonista:
¿Qué opinas de ocultar las toallas sanitarias a los ojos de los hombres? Bueno, los productos que utilizamos hoy en día son sin duda muy diferentes de los que utilizaban las mujeres en el pasado. Al fin y al cabo, la versión moderna es un invento reciente. Merece la pena conocer la historia de este elemento esencial de la higiene femenina.