20 Niños cuyas frases pueden causar tanto estupor como un ataque de risa

Crianza
hace 2 años

Desde el momento en que los niños comienzan a hablar, dan ganas de seguirlos a todas partes y tomar nota de las ocurrencias que salen de su boca. La lógica no estándar de los pequeños y su franqueza llevan periódicamente a los adultos al estupor, pero más a menudo les dan ganas de sonreír o reír a carcajadas.

Genial.guru está seguro de que no existe un niño que, al menos una vez en su vida, no haya proferido frases épicas que se han convertido en una anécdota familiar. Seguro que tú mismo y tus hijos también pueden contar algo parecido.

  • Mi hijo me vio aplicarme corrector y me preguntó por qué lo hacía. Le dije: “Me ayuda a parecer más joven y más enérgica”. Y él dijo: “¿Pero por dentro estás vieja y cansada?”. © humortranslate / Twitter
  • Cuando mi hija menor tenía 4 o 5 años, ella y su papá fueron al banco por un salario, y había fila. Mi hija se volvió ruidosa, no se calmaba, corría, gritaba (era un poco malcriada y tenía mucha energía). Un policía que estaba en la fila trató de influenciarla y dijo, deliberadamente estricto: “Soy un policía. Si no te comportas tranquilamente, te llevaré a la estación”. Todos esperaban que la niña se asustara y se callara. Pero ella dijo bien alto y no menos estrictamente: “¡Y yo soy un fiscal militar!” (como su papá). Todos en la fila se rieron mucho. Ahora es la anécdota favorita de su padre, y eso que ella ya tiene 16 años. © Olya Orlova-Salman / Facebook
  • Una noche, mi hijo de tres años y medio se me acercó y me dijo: “Acuéstate, papá, te curaré”. Después de todo tipo de manipulaciones en mi cuerpo, se produjo el siguiente diálogo:
    -Listo, papá, te curé.
    -¡Gracias, hijo!
    Ya empecé a levantarme, cuando escuché:
    -Son 2 USD. © timudji / Pikabu
  • Mi sobrina, que entonces tenía 3 años, se peleó con su madre, se cayó sobre la nieve y se echó a llorar. Un transeúnte se acercó y preguntó: “Pequeña, ¿por qué lloras?”. Y ella respondió: “¡Siga caminando, señor, no es para usted que estoy llorando aquí!”. © Karlygash Utegenova / Facebook
  • Le pregunté a mi hijo de primer grado cómo le iba en la escuela.
    -Soy un excelente estudiante -respondió.
    -¿Y las notas?
    -Algunas son buenas, otras muy buenas.
    -¿Entonces qué clase de excelente estudiante eres?
    -Bueno, uno más o menos excelente.
    Ahora este es nuestro eslogan. © Buquet / Genial.guru
  • Estábamos caminando por la calle con mi hijo y me preguntó:
    -Mamá, ¿y si alguien se acerca y te dice: “Dame a tu hijo?”.
    -No te daré a nadie. ¡Eres mi tesoro más grande!
    -¿Y por ese todoterreno de ahí tampoco me entregarás?
    -Ni siquiera por un todoterreno. Ni por todos los autos y casas, y aviones y trenes, ni por dinero, juguetes ni todo lo demás, no te entregaré a nadie, ¡porque te amo más que a nadie en el mundo!
    El pequeño caminaba contento, procesando la información y luego preguntó con picardía:
    -¿Y al kínder tampoco me entregarás?
  • El otro día subí a un autobús y había una mujer con su hijita. Cuando ella me vio, dijo:
    -¡Mamá, mamá, mira a esa hermosa chica!
    Estaba un poco avergonzada, pero fue muy agradable. Seguí viajando feliz. Y luego la niña dijo:
    -¡Mamá, mira esa hermosa escalera!
    -¡Mamá, mira ese auto tan hermoso!
    Sí, todo está claro contigo: no entiendes nada sobre la belleza... © Oídoporahí / VK
  • Le dije a mi hijo de 6 años que había comprado un billete de lotería y me preguntó: “Si ganamos, ¿puedo llevarme un millón? ¡Se lo daré a nuestro director para que cierre la escuela para siempre!”. Genio malvado. © OHolyNightowl / Reddit
  • La mejor amiga de mi mamá tiene un hijo 2 años mayor que yo. Naturalmente, pasamos toda la infancia juntos como hermano y hermana. Cuando yo tenía 6 años, mi madre le preguntó seriamente: “Bueno, entonces, ¿te vas a casar con ella?”. Después de pensarlo un momento, él respondió sin dudar: “Nooooo, gracias, ¡no quiero una suegra como tú!”. Se lo recuerdo a mi madre cada vez que quiere conocer a uno de mis pretendientes. © Oídoporahí / VK
  • Estábamos yendo con mi hijo al kínder, charlando alegremente. Él me hacía diferentes preguntas, yo respondía.
    —Mamá, los niños tienen que proteger a las niñas, ¿no?
    —Sí.
    —Y tienen que cederles cosas, ¿no, mamá?
    —Sí.
    —¿Y qué es lo que las chicas tienen que hacerles a los chicos?
    Respondí con una sonrisa: “Decirles que son geniales”. Mi hijo, con sorpresa y decepción en la voz: “¿Y eso es todo?”. © Oídoporahí / VK
  • Cuando era pequeña, era un poco salvaje y no me gustaba que me prestaran demasiada atención. Cuando tenía unos 3 o 4 años, mi tío y yo fuimos a su trabajo. Su jefa se nos cruzó en el vestíbulo. Entonces tuvimos el siguiente diálogo “de chicas”:
    —¿Quién es esta niña tan bonita que vino a visitarnos? ¿Quién eres, linda?
    —Tú quién eres.
    Y esa fue toda la conversación. Bueno, al menos los adultos se rieron un poco. © nuka.cola / Pikabu
  • Mi esposo le regaló a mi amiga un brazalete bellísimo por su cumpleaños. Lo estábamos mirando y admirando juntas. Mi hija se acercó, lo examinó en silencio e hizo solo una pregunta: “¿Cuánto?”. ¡Estábamos indignadas, tan pequeña y ya tan mercantil! Después de todo, lo que importa es el regalo, la atención y bla, bla, bla. Y ella agitó las pestañas y dijo: “Quiero decir, ¿cuánto cumplió tu amiga?”. © Oídoporahí / VK
  • Mi hijo estaba en la bañera y preguntó cuántos años tenía.
    Yo: “Mmm, unos 4 años, 10 meses y 4 días”.
    Después de varios minutos de profunda reflexión, lo escuché decirse a sí mismo de manera tranquila y reverente: “Y todavía no me ha mordido ni un solo animal salvaje”. © yxe1982 / Reddit
  • Mi hijo de 5 años está loco por los coches. Vive y respira el automovilismo. Una vez, estaba manejando su auto de juguete y unos vecinos lo vieron y le gritaron: “¡Guau, pequeño, eres increíble!”. Y mi hijo respondió absolutamente en serio: “Lo sé. Conduzco mejor que la mayoría de los adultos que conozco”. Para ser honesto, no se equivoca. © thisdragonis / Reddit
  • Volví de pescar. Mientras me lavaba y me cambiaba de ropa, mi hijo (4 años) hurgaba vigorosamente en mi bolso. Fingí estar indignado, y le pregunté qué se suponía que estaba haciendo, pero no hubo reacción. Entonces se involucró su abuela, le agitó un dedo en el aire: “¡No es bueno hurgar en las cosas ajenas!”. Mi hijo, sin interrumpir lo que hacía: “Bueno, no es un papá ajeno”. © Alex Konashevich / Facebook
  • Estaba esperando una llamada importante y, cuando me pongo nerviosa, empiezo a limpiar. Mis gemelos de 4 años estaban sentados en el sofá, vigilando el teléfono, porque les había prometido ir al parque inmediatamente después de la conversación. El teléfono sonó, atendieron y en un trágico susurro al unísono: “Hola, ¿eres la ‘llamada importante’? ¡Llámanos más rápido, de lo contrario mamá nos lavará y limpiará por completo!”. © Alena Artemova / Facebook
  • Entramos con mi hijo de 5 años en el elevador, seguidos de un vecino con un pug negro. El perro ya no era joven, tenía sobrepeso, estaba todo cubierto de pliegues, con ojos saltones, resoplaba sin parar, pobrecito. Mi hijo, mirando tiernamente al perro, dijo: “¡Mamá, mira, un perrito! Qué feíto, ¿no?”. El vecino se atragantó con el aire. Yo, tratando de no reírme, representé indignación, diciendo “hijo, cómo puedes decir eso”. Pero en ese momento el desafortunado pug salió junto con el propietario obviamente disgustado. Le dije a mi hijo: “¡Sabes muy bien que fue descortés! El señor se sintió mal. Ama a este perrito y tú dices cosas desagradables sobre él”. Y él respondió: “No quise ofender a nadie. ¿’Feíto’ no es lo mismo que ’lindo’?”. Luego, de repente, se golpeó bruscamente la frente con la palma de la mano: “¡Ah, confundí la palabra con ’bonito’!”. © Dorotejka / Pikabu
  • Tengo un sobrino que es muy famoso en la familia por su desobediencia. Lo conocí el año pasado. Entonces él tenía 3 años. Estábamos conversando, él preguntó:
    -¿En que grado estás?
    -Yo trabajo.
    -¿Estás bromeando? ¡Las chicas no trabajan!
    -¿Y qué es lo que hacen entonces?
    Me miró como si no entendiera las cosas más obvias y dijo:
    -¡Hacen las compras! © Sakshi Singh / Quora
  • Cuando tenía 5 años, estaba locamente enamorado de la hija de 20 años de un rico amigo de mi familia. Le pedí su mano y su corazón y ella accedió de buena gana. Por supuesto que era un juego para ella, pero mis intenciones eran absolutamente serias. Entonces la madre de mi elegida dijo: “Si quieres casarte con mi hija, tienes que tener dinero”. La miré directamente a los ojos y, sin perder un segundo, metí la mano en los bolsillos y le tiré un centavo. Ver su rostro en ese momento no tuvo precio. © kaz6199 / Reddit
  • No le agrado a mi suegra, pero adora a su único nieto. Y todo el tiempo enfatiza que él es una copia de su papá: tiene sus ojos, su sonrisa y su personalidad (en cambio, de mí no sacó nada). Mi hijo escuchó esta canción una y otra vez, hasta que de repente declaró: “¡Sí, somos iguales, somos iguales! ¿Sabes por qué? ¡Porque papá y yo amamos a mamá más que a nadie en el mundo, porque ella es la más hermosa!”. Mi suegra estaba bastante molesta, y yo estaba regocijándome por dentro por el hecho de que un pequeño de cinco años hubiera encontrado una respuesta para esta mujer “maravillosa”.

¿Qué frases infantiles se volvieron memorables en tu familia?

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La mejor es la del niño que dijo que no se casaría por la suegra que le iba a tocar

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