A veces una simple decisión puede cambiarlo todo. Imagina salir a comprar y regresar con un boleto de lotería que transformará el destino de toda una familia. Esta es la increíble historia de una visita a la gasolinera que desencadenó una serie de eventos extraordinarios.
El destino es a menudo impredecible y puede llevarnos por caminos sorprendentes. En esta historia, un hombre que se ve confrontado con un dilema inesperado tras ganar la lotería: mantener en secreto su fortuna.Este hombre decidió ocultarle todo a la familia, para proteger a sus seres queridos de la delincuencia y la avaricia ajenas y propias. El hombre no deseaba que sus familiares dejaran de trabajar.
¿Sabes lo que dicen cuando las probabilidades de que algo suceda son realmente bajas? “Es como ganarse la lotería”. Pero ¿qué dirías si te enteraras de que un hombre realmente ganó la lotería 14 veces seguidas en el transcurso de 30 años? Suena improbable, pero eso es lo que realmente le sucedió al genio matemático Stefan Mandel.
Se cree que mentir no es bueno. Sin embargo, a veces hay situaciones en las que mentir se convierte en una auténtica salvación o simplemente proporciona a la gente un montón de momentos agradables. Los protagonistas de nuestro artículo lo saben de primera mano y están seguros de haber hecho lo correcto al mentir.
Tratar con la gente no es fácil, así que no es de extrañar que vendedores y cajeros se pongan nerviosos o hagan comentarios sarcásticos fuera de lugar. Los señores de las cajas suelen quejarse de que los clientes son a veces maleducados o raros. Pero a veces los propios vendedores hacen cosas fuera de toda proporción.
Ya hemos oído que a menudo se producen divorcios y que los hombres huyen de la responsabilidad con los hijos. Por eso nos apetece conocer algo lindo, claro y eterno. Por ejemplo, historias sobre cómo hay amor en el mundo que sobrevivirá a cualquier dificultad y parejas que simplemente son felices la una con la otra.
Los productos de los escaparates de las tiendas en línea son tan tentadores que estamos dispuestos a echarlos inmediatamente a la cesta y pagarlos. Esperamos la entrega, anticipando la alegría. Pero no siempre es así. A veces, el mensajero trae algo extraño, en otras ocasiones, la mercancía resulta ser defectuosa, o bien, en el punto de entrega los empleados empiezan a cuchichear, hablando sobre nuestras compras. Y entonces te das cuenta de que comprar por Internet es siempre una lotería.
¿Has soñado alguna vez con hacerte millonario? Internet está lleno de historias de gente a la que le tocó el gordo de la lotería y luego se gastó el disparatado dinero en tonterías. Los ricos de verdad gastan su capital sabiamente: nunca lo van a despilfarrar. Esta es solo una pequeña lista de en qué ahorran dinero las mujeres ricas. Haríamos bien en seguir su ejemplo.
Todos los días nos cruzamos con docenas o incluso cientos de desconocidos, de la mayoría de los cuales ni nos acordamos, y al resto los olvidamos con bastante rapidez. Pero ocurre que a la gris cotidianidad le añaden colores los tipos singulares. Esos encuentros permanecen en la memoria durante mucho tiempo, y las historias sobre ellos a veces incluso pasan a formar parte del folclore familiar.
Como suele decirse, no puedes elegir a tu familia. Sin embargo, algunas personas están seguras de que desde que nacieron les tocó la lotería y tuvieron unos padres realmente maravillosos. Unos piensan así desde la infancia, mientras que otros llegan a esta conclusión solo años más tarde, cuando se hacen mayores, más experimentados y más sabios.
Era una noche tranquila y despejada en el campo. Una mujer dormía plácidamente con su perro al pie de la cama. De pronto, un fuerte golpe la despertó. Algo atravesó el techo. El perro comenzó a ladrar ante el ruido fuerte y repentino del intruso. Mientras la mujer recuperaba la lucidez y se limpiaba la cara, encendió la luz. Examinó la habitación, intentando hallar la causa del ruido. Se quedó sorprendida y confundida al ver un gran agujero en el techo. Debajo del agujero, justo al lado de donde su cabeza descansaba, vio una roca del tamaño de un puño. Sorprendida, llamó a un contratista de inmediato, quien le dijo que la roca probablemente provenía de una obra cercana.
Después de todo, tuviste suerte de encontrar ese apartamento de 2 por 2 metros. Ninguno de tus amigos tiene uno: la mayoría vive en módulos cápsula donde solo es posible dormir sin poder dar vueltas. El precio de lo que hoy llaman “una mansión” es escandalosamente alto y todavía no puedes aceptarlo por completo. Mañana tienes que firmar ese contrato y hacer el pago inicial. En realidad, tuviste la oportunidad de comprarlo solo porque ganaste la lotería. Así es como vives en 2999: tú y los otros 100 mil millones de personas.Algunas personas, sin embargo, invierten en numerosos “bloques de apartamentos del nuevo milenio” en otros planetas. La última tendencia inmobiliaria es establecerse en algún lugar de Ross 128 b, Marte o incluso Saturno. También estabas pensando en ello, pero amas demasiado la atmósfera y la naturaleza de la Tierra. Mientras tomas tu café de la mañana, un holograma publicitario emergente llena instantáneamente todo el espacio de tu cápsula y simplemente no desaparece. “¡Querida Tierra! ¡No pierdas la oportunidad de cambiar tu vida de una vez por todas! ¡Echa un vistazo a los bloques de apartamentos más nuevos en Ross 128 b, Marte, Europa y Saturno! ¡Invierte en tu nueva vivienda y en tu nueva vida! ¡Excursiones en autobús disponibles todos los días!”.
Los niños pueden llegar a hacer cosas conmovedoras y sorprendentes, y también extrañas, de esas que nos hacen preguntarnos un poco sobre el porqué de sus acciones. Como la que hizo este pequeñito, que logró enternecer no solo a su madre, sino también a varias personas, al enseñar el secreto que tenía cuando hablaba con la pared de su casa.
La vida, muchas veces, nos sorprende con sus grandes coincidencias. Algunas podríamos haberlas imaginado, como cuando nos encontramos con algún conocido en el transporte público, pero otras nos toman tan desprevenidos que, si no tuviéramos pruebas, no las creeríamos. Estas son las historias de diez afortunadas personas a quienes el universo les sonrió y las dejó con el ojo cuadrado.
Uno de los momentos más difíciles de la vida es cuando perdemos a nuestros padres, y más aún si es de manera inesperada. La mayoría de las veces, es el apoyo de tu pareja lo que te brinda el consuelo o apoyo necesario para superar el duelo. A veces, no obstante, el dolor termina afectando a todo el entorno y las cosas se vuelven muy difíciles. Sin embargo, cuando hay una herencia de por medio, puede aparecer una faceta desconocida de las personas en quienes más confías. Es en estos casos cuando puedes darte cuenta de quiénes son los que de verdad están contigo por lo que eres sin que importe qué es lo que tienes.
Hay un dicho que dice “Nunca conozcas a tus héroes”, indicando que posiblemente podrán decepcionarte, y este se podría aplicar con algunas celebridades. Pero hay algunos afortunados que en vez de decepciones lograron tener un momento grato para recordar cuando, por casualidad, se encontraron con algún famoso y les dio otra perspectiva de esa persona que suelen ver en la pantalla y las revistas.
Se dice que la generosidad crea un efecto dominó que nos ayuda a ser más felices y a sentirnos menos solos. A su vez, tener pensamientos positivos nos hace más propensos a dar. Para quienes necesitan alimentar el alma con hechos de la vida real en los que el amor hacia uno mismo y hacia los demás es el protagonista, les traemos algunas historias que demuestran que a pesar de los obstáculos, siempre hay motivos para salir adelante y sentirse agradecidos.
Las probabilidades de que alguien lance algo y que nosotros lo cachemos en el aire, de manera perfecta y casi en silencio, son prácticamente nulas. Pero cuando esto sucede, esperamos que todo un estadio repleto de gente lo haya visto para que nos ovacionen y nos hagan quedar como una superestrella digna de poseer un lugar en el Paseo de la Fama de Hollywood. Sin embargo, esto generalmente pasa inadvertido y es probable que nadie crea que algo tan insólito sí sucedió.
Un corte de pelo puede cambiar drásticamente la apariencia de un cliente, incluso si tiene cuatro patas en lugar de dos piernas. Los peluqueros a veces hacen trabajos tan sofisticados que los dueños no pueden reconocer a sus mascotas con su nuevo aspecto. A algunas personas les encanta el resultado, mientras que otras cuentan las semanas hasta que el pelaje vuelva a crecer. Pero nadie queda indiferente.
Tener un adolescente en casa es siempre una especie de lotería: hoy puedes tener una brisa fresca, mientras que mañana puede convertirse en una tormenta. Y cuando tienes tres adolescentes que no se llevan bien, que la suerte te acompañe. Por suerte, todo esto es temporal, y con paciencia y algo de habilidad, puedes encontrar fácilmente la salida.
Todas las personas tienen algún secreto. Ya sea grande o pequeño, siempre existe algo que la gente prefiere reservar para ella y nunca decírselo a nadie. No necesariamente porque sean cosas malas, sino que, para algunos, es mejor mantener ciertos temas de manera confidencial, y no es sino hasta después de su fallecimiento que los demás se enteran de sus actos.
Ir a la peluquería de mascotas es como una lotería. Nunca sabes si te vas a llevar a casa un animal precioso o si deberías habértelo pensado dos veces antes de decidir cortarle el pelo. Pero algunos de los personajes de esta selección decidieron que podían hacerlo ellos mismos mejor que cualquier profesional.
La estrella de Los ángeles de Charlie, Drew Barrymore, es madre soltera de dos hijas: Olive y Frankie. Tras divorciarse del padre de las niñas, le ha costado volver al mundo de las citas, porque sus pequeñas son la prioridad número uno para ella.
La suerte es algo totalmente aleatorio; un día nos pasa algo tan bueno que nos cuesta creerlo, y al siguiente, todo lo contrario. Es una lotería. Nuestros protagonistas lo saben muy bien, por eso decidieron compartir su infortunio con el mundo posteando el regalito que la mala suerte les dejó en internet, así por lo menos no todo son lamentos.
A veces, la vida nos lleva por caminos inesperados, y la historia de Joan R. Ginther no hace más que confirmarlo. Ganó la lotería no una vez, ¡sino cuatro! Para ponerlo en perspectiva, la probabilidad de ganar la lotería es de 1 en 200 millones. Sabemos que este es un caso extremo y que probablemente no tengamos tanta suerte. Pero también creemos que el universo funciona en formas misteriosas y que pueden surgir ciertos acontecimientos inesperados cuando menos lo esperamos.
El trabajo es a menudo una lotería. Y el premio principal es un jefe adecuado y unos compañeros amables que están dispuestos a ayudar y compartir su experiencia. Pero a veces resulta que el equipo aparentemente normal de hecho solo trama intrigas y escándalos a tus espaldas. Y otras veces ni siquiera puedes soñar con cobrar a tiempo.
Las entrevistas de trabajo son una verdadera lotería y nadie conoce el secreto para conquistar el corazón de los gerentes y entrevistadores. Algunas personas logran elegir las mejores palabras y frases que automáticamente les garantizan un lugar en una empresa. Puede que sea cuestión de suerte, o puede que sea la adrenalina la que les da su poder creativo.
A veces, la suerte nos favorece en el momento más inesperado. Unos ganan la lotería, otros encuentran una perla en un mejillón. Algunos se salvan de acontecimientos trágicos debido al propio destino. E incluso si solo encuentras dos bocadillos en la misma envoltura, no es un mal motivo para alegrarse un poco.
La cultura mexicana es mundialmente famosa por estar llena de tradiciones, colores y folclor. Sin duda alguna, sus costumbres son el resultado de mucha historia. Los mexicanos son muy afortunados por poseer mucha riqueza gastronómica, cultural, artística, etc., y por ello muestran con orgullo sus creaciones.
Mientras que unos creen que la felicidad siempre está muy lejos, otros están seguros: no hay lugar mejor que el hogar, donde todo es querido y familiar. Después de todo, no solo los moteles de carretera, sino también los hoteles de cinco estrellas pueden arruinar la experiencia de la estancia, y el propietario de un departamento alquilado puede encontrar fácilmente muchas formas de ahorrar en las comodidades o hacer que uno ponga los ojos en blanco al mirar diseños insuperables.
La suerte le sonríe a cada persona al menos una vez en la vida. Puede ser cualquier cosa: dinero encontrado en la calle, una agradable sorpresa de un completo desconocido o ganar la lotería. Ciertamente es bueno recibir estos regalos del destino. Y, por supuesto, no quieres más que contárselo a todo Internet.
Todos los días nos cruzamos con decenas o incluso cientos de desconocidos, nos encontramos con ellos en tiendas, transportes y cafés. En la mayoría de los casos, ni siquiera nos damos cuenta, pero algunos se nos quedan grabados en el corazón durante mucho tiempo. Algunos son memorables por su descaro, otros por su repentina cortesía, o incluso por su generosidad.
Millones de personas en todo el mundo rentan casas y apartamentos para vivir. El punto es que alquilar una vivienda suele ser una especie de lotería, ya que no siempre uno tiene la oportunidad de conocer a los dueños antes de cerrar el contrato. Y en ocasiones, los propietarios de las viviendas alquiladas les dan a los inquilinos unas sorpresas de lo más originales.
Muchas veces, las posibilidades de que suceda algo que pensamos o intentamos son de una en un millón. Lo curioso es cuando sacamos el número ganador, como en una lotería, y somos testigos de que lo que parecía imposible se hace realidad. Algunas personas pueden dar fe de que esos azares de la vida existen, ya que vivieron las casualidades más disparatas que podrían haber imaginado.
A veces, la suerte está al acecho donde no se la espera en absoluto. Un billete encontrado en el bolsillo de una chaqueta, una ganancia inesperada en la lotería, joyas antiguas halladas en una caja fuerte en ruinas: todos, probablemente, han tenido este tipo de historias. Lo que importa es que estas situaciones inspiren y alegren.
Comprar cosas nuevas se está convirtiendo cada vez más en una verdadera lotería. Incluso en una tienda normal, donde el producto seleccionado se puede tocar, oler y, en general, examinar desde todos los ángulos, existe el riesgo de llevarse gato por liebre. Qué podemos decir de los pedidos por Internet cuando, a veces, en el tan esperado paquete llega algo completamente diferente de lo que habíamos pedido.