El ritual de hacer regalos existe desde hace siglos. Se dice que llegó incluso a los cavernícolas: se obsequiaban unos a otros con piedras o dientes de animales de formas únicas para expresar su gratitud. Sí, un regalo es una manera de demostrar amor, respeto, subrayar la importancia del acontecimiento festivo. Pero a veces incluso de los seres queridos se puede recibir un regalo tan extraño que es imposible olvidarlo y ni recordarlo sin reírse.
El aroma y sabor de los alimentos que consume la futura madre se transfieren al líquido amniótico, permitiendo que el bebé se familiarice con diferentes sabores antes de nacer. Los gustos culinarios de una mujer durante el embarazo, ya sea pescado salado, una gran cantidad de dulces o, por otro lado, vegetales, pueden influir en las preferencias gustativas de su futuro hijo. En este artículo, hemos recopilado historias divertidas sobre los antojos y comportamientos cotidianos que experimentaron mujeres embarazadas y las singulares situaciones que sus embarazos generaron.
Sumergirse en la fascinante cultura maorí es adentrarse en un universo de tradiciones y valores arraigados a la tierra y la naturaleza. A lo largo de los siglos, este enigmático pueblo ha tejido una red de mitos, costumbres y conocimientos transmitidos de generación en generación. Desde misteriosos rituales hasta su sorprendente cosmovisión, hoy desvelaremos algunos de los pilares fundamentales de esta ancestral civilización.
Aunque muchas personas se quejen de que los adolescentes no pueden salir ni a la esquina sin su celular, este joven agradeció tenerlo cerca cuando escuchó algo que le erizó la piel. Pudo grabar un video y el misterio que captó lo convirtió en viral.
Estás intentando colarte en los oscuros laberintos de las antiguas pirámides en busca de la inmortalidad. Abres una cerradura de rompecabezas de la puerta y escuchas un fuerte traqueteo. Todo a tu alrededor comienza a temblar y ves que se abre una puerta enorme. La habitación está llena de oro y pergaminos antiguos. Un gran tazón dorado cae justo a tus pies. Pero lo echas a un lado y avanzas, porque viniste aquí con un propósito diferente.De repente escuchas pasos. Te escondes detrás de un pilar rápidamente y ves a un hombre aparecer desde las profundidades de la habitación. Estás asustado porque el anciano parece una momia viviente. Su piel está seca y estirada sobre su esqueleto. Arrastra su largo cabello detrás de él como una cola de vestido. ¿Y él está... sonriendo? El hombre te invita a sentarte a su lado. Resulta que este anciano es la última persona de una civilización antigua que quiso descubrir el secreto de la inmortalidad. Y lo consiguió.Hace 3.000 años, esta tribu celebró su ritual. Bailaron alrededor de un fuego y un caldero enorme. Causaron una gran tormenta con su baile. Y un segundo después, un enorme rayo cayó sobre el caldero. Hubo una columna de luz azul durante varios minutos. Durante este tiempo, toda la tribu siguió bailando y cantando. Cuando terminó la tormenta, el líder tribal se acercó al caldero. Solo quedaban unas pocas gotas. Las vertió en un frasco y las bebió.
Ni salas de partos ni cápsulas de ácido fólico, y una soga a falta de epidural. Las mujeres embarazadas de la antigüedad tenían que confiar ciegamente en métodos en los que hoy difícilmente podríamos creer. A falta de avances en la medicina, las creencias y costumbres de las futuras madres podían dar como resultado situaciones que a las chicas modernas les harían preguntarse: “¿Por qué?”.
El posparto es una etapa muy significativa, a pesar de que no siempre se la tiene en cuenta. Las decisiones que se toman durante este tiempo pueden ser fundamentales tanto para la salud de la madre como para la del hijo; por lo tanto, es necesario meditarlas con detenimiento. Así es como cada cultura y cada época han tenido sus propias costumbres sobre qué tipo de atención requiere el posparto. Hay ciertas tradiciones al respecto que están muy arraigadas y pueden resultarnos sorprendentes. Tal es el caso de China y México.
Muchas veces, cuando pensamos en la escuela, automáticamente se desbloquean recuerdos como el olor de los libros, la lista de útiles, salir corriendo para no llegar tarde en la mañana, etc. También asumimos que en todas partes las vacaciones son en julio o que los pequeñines van a la escuela de lunes a viernes. Sin embargo, nos podemos llevar la sorpresa de que en otros rincones del mundo, la experiencia de ir a la escuela es completamente distinta.
Vivir bajo los reflectores puede tener sus beneficios, pero también puede ser una carga, especialmente cuando se trata de romance y matrimonio. La falta de privacidad y la atención constante pueden poner a prueba cualquier relación, pero algunas parejas de celebridades parecen haber aprendido a superar la presión y han conseguido que su matrimonio dure décadas. Además, lograron mantener su relación feliz y satisfactoria, lo que hizo que el público se preguntara cuál es su “receta secreta”.
Cada boda es diferente. Los novios siempre le dan un toque único a la celebración y procuran imprimirle su propia personalidad, ya sea a través de la decoración, alimentos o lugar que eligen para casarse. Sin embargo, hay elementos tradicionales que se repiten una y otra vez en las bodas, aún sin que sepamos por qué los incluimos en nuestra propia celebración. No obstante, todos tienen una explicación y un origen que se remonta a muchos años atrás.
El intercambio de anillos es un ritual de hace 3000 años, y la primera alianza de diamantes de la que se tiene constancia se remonta a 1477. Hoy en día, los anillos de diamantes siguen siendo la máxima señal de amor y una de las más altas representaciones del compromiso.
El ritmo que llevamos puede agobiarnos y hacernos infelices casi sin que nos demos cuenta. Estamos tan preocupados por el trabajo o asediados por publicidades que nos incitan a comprar más y más cosas que a veces olvidamos parar un segundo y pensar realmente si estamos haciendo lo que nos hace felices. Sin embargo, muchos logran superar estos obstáculos y encontrar hábitos que los ayudan a disfrutar la vida.
Dedicar tiempo a una misma es un ritual especial para las mujeres de todas las edades. Una visita al spa, a la peluquería o al salón de belleza siempre es una pequeña alegría. Sin embargo, a veces incluso un simple corte de cabello o una manicura pueden salir mal y dejar un sentimiento desagradable.
Las mujeres francesas no solo son famosas por su estilo sofisticado y su encanto, sino también por sus hábitos especiales en la belleza y el hogar. Parece que tratan de hacer con gracia y consideración cualquier actividad a la que se dedican. Y cuanto más uno estudia sus tradiciones y hábitos, más se convence de lo mencionado.
Hace mil años, si una quería ponerse guapa, no tenía la posibilidad de comprar en Amazon algún cosmético milagroso que le recomendaran las amigas. Tampoco podía ir a la farmacia si tenía un dolor de cabeza. Pero eso no quiere decir que nuestras trastatarabuelas no hicieran nada para calmar el dolor ni se las ingeniaran para verse mejor. De hecho, el contacto con la naturaleza y la imaginación eran buenas migas para crear productos que realzaban la belleza y que también curaban algunas enfermedades.
Todos vivimos dentro de nuestras casas y nos cruzamos con los vecinos solo de vez en cuando. Pero a veces entran volando en nuestra vida como un remolino, con acciones que no hacen más que dejarnos completamente perplejos y confundidos.
Casi todos los que hoy han logrado convertirse en propietarios de su propio espacio para vivir alguna vez alquilaron una vivienda. Y estas personas saben con certeza que la relación “inquilino-propietario” es muy especial y requiere paciencia, a veces ilimitada.
La hora de lavar los platos después de comer puede ser sin duda una de las actividades menos deseadas; la idea de ensuciarnos las manos con restos de comida y pasar más de una hora tallando y tallando una olla es todo lo contrario a tentadora. Pero resulta ser más importante de lo que imaginamos, incluso algunos chefs profesionales aseguran que el lavado de platos tiene su chiste y hasta existen muchos malos hábitos alrededor de esta labor doméstica.
¿Cuándo fue la última vez que sacaste álbumes con fotografías impresas de tu armario y te sumergiste en la atmósfera de antaño durante varias horas? Ninguna galería de tu teléfono o cámara de fotos se puede comparar con este ritual. A los protagonistas de este artículo les encanta revisar fotos viejas y no dudan en compartir incluso aquellas que nos sacan una sonrisa.
Hoy en día es cada vez más difícil elegir un regalo: la gente tiene muchas cosas y es difícil sorprender a alguien con algo. Por ejemplo, muchos consideran que la ropa y los souvenirs son los peores regalos. La ropa porque prefieren comprarla por su cuenta y elegirla según su gusto y su talla. Y las pequeñas cosas bonitas, como figurillas, llaveros, imanes y velas, se consideran simplemente recolectores de polvo innecesarios. Y un tercio de los que participaron en la encuesta que descubrió estos resultados directamente no querían recibir ningún regalo para la Navidad.
Hasta nuestros seres queridos a veces pueden hacer algo tan extraño que uno se pregunta involuntariamente: ¿en realidad conozco a esta persona? Y de los extraños, con más razón, no se sabe qué esperar. E incluso una cita muy esperada o la relación más prometedora pueden terminar en un fracaso divertido (o no tanto). Seamos francos: después de algunos encuentros, solo podemos alegrarnos de que algo como eso nunca volverá a suceder.
Ya sea por trabajo, escuela o algún compromiso importante, algunas veces es casi imposible tener tiempo para ir con algún profesional de la belleza. Sin embargo, todo se puede complicar cuando tu estilista de cabecera no puede agendar citas a domicilio y la única opción es esperar o buscar algún remedio por internet.
Llega una época del año en la que comenzamos a prepararnos para recibir a nuestra familia en casa y para vivir la magia del invierno, pero sobre todo de la Navidad. Las luces no se hacen esperar, enormes pinos son colocados en las salas de las casas y graciosas figuras de duendes o peregrinos adornan los jardines. Y no importa si es muy temprano o muy tarde, para algunos, la decoración navideña es un ritual imperdible cada año.
Todos alguna vez en la vida hemos tenido situaciones que probablemente nos gustaría olvidar lo más pronto posible. Sin embargo, no siempre caemos en ello por nuestra culpa, sino gracias a las personas que nos rodean y a las que frecuentemente les falta un poco de cortesía. Esto incluso puede ser divertido, pero muy a menudo simplemente te dan ganas de que la tierra te trague, por ejemplo, si ante todo el mundo te proponen deshacerte de los parásitos.
It (Eso) es una de las novelas más voluminosas y psicológicamente profundas de Stephen King. Hacer una buena adaptación cinematográfica de un libro así no resulta nada sencillo. Aun así, el argentino Andrés Muschietti logró hacer frente a esta tarea de una manera sobresaliente, a juzgar por las críticas de los expertos de cine. No en vano, tuvo que sacrificar algunos detalles del libro, a veces significativos.
Cocinar es un ritual que se disfruta desde la compra, la preparación y hasta el momento de comer. Quienes gustan de pasar tiempo en la cocina, saben que cada utensilio tiene un uso muy específico y que nunca son demasiados, pues cada uno es una oportunidad para una nueva creación. Afortunadamente, existen diseñadores que disfrutan de desarrollar ideas que hagan esta actividad más placentera cada día.
Hoy en día, la crianza de los hijos no resulta para nada fácil. Desde las pantallas de los televisores y gracias a Internet, los padres primerizos reciben una cantidad de información alarmante, la cual acaba desencadenando todo un mundo de confusiones. Ademas, hay que sumar a esto los consejos de aquellos que los rodean: amigas y ancianas que, sentadas en un parque y en cuestión de minutos, realizan todo tipo de diagnósticos sobre tu hijo. Bueno, ¿cómo no entrar en pánico si tu pequeño ya tiene dos años y todavía no construye frases completas? ¿Cómo mantener la sangre fría cuando tu hijo, repentinamente, rechaza la carne o la leche?
Los dueños de perros conocen de pies a cabeza los hábitos y características de sus amigos de cuatro patas: qué es lo que prefieren comer, qué es lo que adoran jugar y cómo se comportan cuando han hecho algo indebido. Pero, a veces, la conducta de los perros es extraña, tanto que incluso los dueños experimentados no pueden entender el sentido de sus acciones escondidas.
El estrés puede afectar a personas de diferente estatus social, edad y nacionalidad. En muchos países existen métodos especiales para su eliminación. Los suecos, por ejemplo, tienen fika, un descanso obligatorio para tomar café y comer algo rico en un ambiente agradable. Los daneses siguen siendo una de las naciones más felices del mundo, entre otras cosas por su filosofía de pasar tiempo con los seres queridos en un ambiente acogedor (hygge). Pero en otros lugares existen formas de lidiar con el estrés muy extravagantes.
Al mirar a las mujeres modernas del “país del sol naciente” parece que en algún lugar esconden la receta de la eterna juventud. Bromas aparte, incluso las investigaciones científicas demuestran que a ellas no les resulta fácil envejecer. Y esta magia sucede no solo por sus características genéticas, sino también gracias a un cierto cuidado de sí mismas, el cual te detallamos en nuestro artículo. Estos consejos son fáciles de aplicar para cualquier tipo de piel y están relacionados con el estilo de vida en general.
Solamente un hombre soltero y mayor de 35 años con el título de cardenal y un grado de doctorado puede llegar a ser el obispo de Roma. Esta es la etapa superior en la carrera del sacerdote católico, la cual es increíblemente difícil de lograr. Pero ¿por qué muchos la quieren conseguir?
A veces observamos cosas tan bizarras y extrañas que tenemos que mirar dos veces para creer lo que vemos. "¿Cómo diablos llegó eso allí?" es la pregunta que las personas que tomaron estas fotos se hicieron al ver estas escenas que no tienen explicación. Genial.guru ha escogido algunas de esas fotografías que te dejan con la incógnita. No juzguemos, solo hay que relajarse y tener un poco de humor.