10 Consejos para elegir la ropa interior perfecta y cuidarla como se debe
La ropa interior de calidad suele tener un precio considerable. Por eso, cuando un nuevo sujetador o unas bragas se rompen rápidamente o pierden su apariencia original, es, como mínimo, decepcionante. En algunos casos, los culpables son los fabricantes, pero en otros, somos nosotros mismos al no cuidarla adecuadamente. Aquí te explicamos cómo elegir ropa interior de calidad en la tienda y cómo mantenerla en buen estado durante más tiempo.
Evita los sujetadores blancos
Los sujetadores blancos son, sin duda, una de las prendas más poco prácticas del armario femenino. Primero, este tipo de ropa interior tiende a adquirir rápidamente un aspecto descuidado: se mancha y pierde su blancura radiante. Esto obliga a lavarlo con más frecuencia, lo que acelera su desgaste.
Además, los sujetadores blancos suelen ser visibles tanto debajo de ropa oscura como clara. Si los colores vivos o los estampados llamativos no te convencen, lo mejor es optar por un sujetador color piel, que puedes usar con ropa de cualquier tonalidad.
Revisa la entrepierna de las bragas
Para evitar molestias en zonas delicadas, los fabricantes suelen incluir un refuerzo de tela en la entrepierna de las bragas, conocido como refuerzo o forro. Normalmente, esta pieza está hecha de algodón, un material que absorbe bien la humedad, permite la ventilación y protege las zonas íntimas de posibles infecciones. En ropa interior de calidad, el refuerzo está bien cosido, sin arrugas ni pliegues.
Algunas marcas dejan uno de los extremos del refuerzo sin fijar, creando un pequeño bolsillo. Aunque algunas personas creen que esto mejora la ventilación, en realidad, es solo una estrategia para abaratar costos. Este diseño no aporta ventajas reales y, peor aún, puede hacer que las bragas se desgarren si el “bolsillo” se engancha con algo en el armario o cajón.
Los sujetadores con aros no siempre son la mejor opción
Muchas mujeres prefieren los sujetadores con aros porque ofrecen un buen soporte y hacen que el busto luzca más atractivo. Sin embargo, algunos fabricantes emplean aros de un solo tamaño para diferentes copas, lo que puede provocar un mal ajuste y hacer que los aros se claven dolorosamente en la piel. Además, este tipo de sujetadores suele desgastarse más rápido.
Si prefieres este modelo, es importante invertir en un sujetador de alta calidad. Asegúrate durante la prueba de que los extremos del aro estén correctamente colocados: uno en la zona de la axila y el otro en el escote. También puedes buscar modelos con aros fabricados con materiales alternativos, que sean más cómodos.
Examina las costuras y otros detalles
Para que la ropa interior dure más, las costuras deben ser suaves y uniformes. Si los puntos están desiguales o hay hilos sueltos, es probable que la prenda sea de baja calidad y termine en la basura rápidamente.
La mayoría de las marcas utilizan costuras en zigzag, pero hay una versión más duradera llamada triple zigzag, que proporciona mayor resistencia y asegura una vida útil más larga para la prenda.
Examina cuidadosamente el encaje
Los sujetadores de encaje suelen tener un aspecto elegante y femenino. Sin embargo, si están hechos con materiales baratos, pueden ser un verdadero suplicio. Este tipo de tejido suele ser áspero al tacto, irrita fácilmente la piel sensible y puede causar molestias en el busto.
El encaje de buena calidad, en cambio, se fabrica con fibras naturales, lo que lo hace más denso y duradero. Este material no muestra enganches, bolitas ni irregularidades en el tejido. Además, en los sujetadores de calidad, el diseño del encaje en ambas copas será perfectamente simétrico.
Prueba la elasticidad de las partes laterales del sujetador
Un buen método para evaluar la calidad de un sujetador es estirar suavemente las partes laterales y los tirantes. Si el tejido cede con demasiada facilidad, es probable que no proporcione el soporte necesario y que el sujetador se deforme rápidamente con el uso.
También es importante revisar las costuras y los cierres para asegurarse de que estén bien fijados y puedan sostener el sujetador de manera segura.
Los sujetadores deportivos con cierre son una mejor opción
Aunque los cierres en sujetadores deportivos pueden parecer un elemento innecesario, en realidad tienen varias ventajas durante el ejercicio. Primero, muchas mujeres encuentran incómodo ponerse modelos ajustados que se colocan por la cabeza. Segundo, durante actividades físicas intensas, el sudor puede hacer que el sujetador pierda su ajuste y se deslice. Los cierres permiten ajustar la prenda para un mejor soporte. Además, si el sujetador se estira con el tiempo, puedes simplemente ajustarlo más firmemente en lugar de reemplazarlo.
Evita el detergente en polvo para lavar ropa interior
La mayoría de los especialistas desaconsejan lavar la ropa interior en lavadora, ya que esto acelera su desgaste. Además, los detergentes en polvo no son adecuados para estas prendas, ya que sus residuos pueden causar irritación en las zonas íntimas o reacciones alérgicas.
Lo ideal es lavar la ropa interior a mano con agua fría, utilizando jabones hipoalergénicos o geles especiales. Mientras este método funciona bien para sujetadores, en el caso de las bragas puede ser necesario usar productos antibacterianos en el refuerzo para eliminar microorganismos que puedan haber quedado.
Seca la ropa interior con cuidado
Aunque los sujetadores puedan salir ilesos del lavado, el proceso de secado puede representar un verdadero desafío. El primer paso es eliminar el exceso de humedad envolviendo cuidadosamente la prenda en una toalla y presionando suavemente para absorber el agua. Evita retorcer el sujetador, ya que esto puede deformar las copas y las costuras.
Para prevenir la decoloración de las telas o la aparición de bacterias dañinas, es recomendable colgar los sujetadores en un tendedero en un lugar bien ventilado, lejos de la luz solar directa. Además, asegúrate de dejar suficiente espacio entre las prendas para permitir una buena circulación del aire. Algunas prendas pueden secarse en un toallero térmico sin problemas, siempre que la temperatura del dispositivo no sea demasiado alta. Verifica que el calor sea moderado para no dañar los materiales delicados.
Evita guardar los sujetadores en ganchos
Para preservar la forma de los sujetadores, lo ideal es colocarlos en filas dentro de un cajón o compartimento, con los cierres abrochados para evitar que dañen otras prendas.
Algunas personas optan por colgarlos en perchas, pero esto no es recomendable, ya que los tirantes y otras partes elásticas pueden estirarse con el tiempo. Doblarlos por la mitad también es una mala idea, ya que puede deformar las copas rápidamente.
El desodorante puede dañar la ropa interior
Con el tiempo, incluso en la ropa interior de alta calidad, pueden aparecer manchas difíciles de eliminar. Esto ocurre porque el tejido cambia de color no solo por el sudor mezclado con los ingredientes del desodorante, sino también por el propio producto cosmético. Para evitar esto, es mejor aplicar desodorantes o antitranspirantes sobre la piel antes de ponerte la ropa interior y esperar a que el producto se seque por completo.
Por cierto, existen algunos trucos útiles para elegir no solo ropa interior de calidad, sino también cómoda. Además, puedes usar estas ideas para darle un aire fresco a un sujetador o unas bragas que ya te hayan aburrido.