11 Formas escandalosas en las que la gente despilfarró su dinero

El dinero es un tema complejo: algunas personas lo ahorran, otras lo gastan sabiamente, y luego están los que acaban malgastándolo. En este artículo, hemos recopilado una serie de historias breves sobre personas que perdieron su dinero de formas inesperadas y sorprendentes. Desde compras escandalosas hasta caer en planes descabellados, estas experiencias ofrecen valiosas lecciones que podrían guiarte en tu próxima decisión financiera.

• Un chico con el que trabajé mantenía una relación a distancia con una chica a la que aún no conocía en persona. Entonces, de repente, ella le dijo que podía volar y quedar con él en un mes. En ese momento, él vivía en el sótano de la casa de sus padres, algo que no había revelado antes en sus charlas. Presa del pánico, consiguió un departamento.
  Entonces fue a uno de esos sitios de alquiler de muebles y alquiló un departamento entero: un sofá, mesas, un juego de comedor, un dormitorio, un televisor, etc. Todo el apartamento estaba lleno de muebles de alquiler, que, por si no lo sabes, salen caros muy rápido. Después de todo esto, por fin apareció la chica. Fueron a su departamento, y fue entonces cuando ella le dijo que debían romper.
  Ella no quería hacerlo por mensaje de texto y sin encontrarse con él al menos una vez. Pensó que no sería justo para él. Se quedó una noche y al día siguiente tomó el avión. Al parecer, su parada en nuestra ciudad fue solo una escala prolongada, ya que se dirigía a Europa de gira con amigos.
  Ella durmió en la cama alquilada y él en el sofá alquilado. Al día siguiente, la llevó al aeropuerto en su coche de alquiler. No sé cuántos miles habrá gastado en esa cita, pero vaya desperdicio. © aussydog / Reddit

• Quería que mi pedida de mano fuera perfecta: un restaurante elegante, música romántica y un impresionante anillo de diamantes. Me arrodillé y le dije: “¿Quieres casarte conmigo?”. Puso cara de disgusto. “¡Claro que no!”, gritó.
  Todo el restaurante se quedó helado. “¿Por qué?”, pregunté con voz temblorosa. Ella se burló. “¡No voy a casarme con un hombre que me pide matrimonio con un anillo de diamantes falso!”. Los comensales se quedaron boquiabiertos.
  Yo estaba furioso. ¿Cómo podía insultarme así? Pero cuando volví al joyero para pedirle respuestas, se me cayó el estómago. Ella tenía razón: el anillo era falso y me habían estafado miles de euros.

• Una vez compré por 600 dólares lo que se anunciaba como “tierra enriquecida con diamantes” para cultivar “plantas de lujo”. En el sitio web había comentarios elogiosos y fotos de jardines que parecían sacados de un palacio real.
  Cuando llegaron las bolsas, me sorprendió encontrar tierra normal con purpurina. Intenté plantar en ella, pero no creció nada, salvo la dolorosa conciencia de lo crédula que soy. Mis vecinos siguen haciendo bromas sobre mi “barro de lujo” cada vez que ven mi triste jardincito.

• Cuando era recién licenciada, me estafó una compañía de seguros. Estaba tan contenta de que me contrataran que me engañaron haciéndome creer que podía ganar dinero vendiendo a la gente seguros que no querían ni necesitaban.
  Pagué 350 dólares por un libro de texto para un examen con el fin de obtener la certificación. Aunque aprobé el examen, en menos de una semana me di cuenta de que la empresa era una estafa, con un guion ridículo que, si nos salíamos de él, nos metería en problemas, y llamadas en frío.
  El peor. Error. Jamás cometido. © Unknown author / Reddit

• Compré en eBay una máquina de escribir antigua que se anunciaba como propiedad de un escritor del siglo XIX. Me costó 1200 dólares y pensé que sería un tema de conversación único y peculiar. El vendedor incluso me contó que la máquina había pertenecido a otro escritor famoso, lo que hizo que pareciera un hallazgo especial.
  Cuando llegó, la máquina de escribir estaba rota y ni siquiera funcionaba. Peor aún, era evidente que no era tan antigua ni valiosa como decía el vendedor.
  Ahora, lo único que me atormenta es darme cuenta de que podría haberme gastado esos 1 200 dólares en unas vacaciones de verdad.

• Una vez mi coche quedó con la cerradura bloqueada durante la noche. Llamé al primer nombre que aparecía en la búsqueda de Google. Me dieron un presupuesto de 60 dólares, así que acepté. El “cerrajero” solo utilizó una lámina para abrir mi puerta y me cobró 130 dólares. No tuve más remedio que pagar y marcharme muy triste. © El_Clinico_Magnifico / Reddit

• En tiempos de necesidad, tuve que vender una cámara muy cara (de unos 900 dólares) que había comprado con mi primer sueldo y que me era muy querida. Era joven, y un hombre respondió a mi oferta por correo electrónico, diciéndome que estaba interesado, pero que estaba de viaje de negocios. Me dijo que sería muy amable de mi parte enviarlo a algún lugar de África, y me aseguró que pagaría cualquier gasto extra.
  No solo nunca me pagó nada, sino que además acabé pagando cien dólares por el envío. Lección aprendida, pero aún hoy me entristezco cuando pienso en ello. © SkyhuntL / Reddit

• Decidí cumplir un sueño de la infancia e instalar una bolera de una sola pista en mi sótano por 50 000 dólares. Parecía la forma perfecta de organizar fiestas y entretenerme. Pero cuando se me pasó la novedad, me di cuenta de que nadie quería jugar más de una o dos partidas.
  Ahora solo tengo un recordatorio increíblemente ruidoso y que ocupa todo el espacio de mi pobre control de impulsos. Podría haberme ido de vacaciones 20 veces con ese dinero, en vez de sentarme solo en el sótano de mi casa a lanzar bolas.

• Mi novio planeó un fin de semana romántico en un hotel de lujo. Todo parecía perfecto, hasta el momento de pagar. Su tarjeta fue rechazada y se puso rojo de vergüenza. Yo sonreí y pagué nuestra estancia.
  Cuando nos íbamos, la recepcionista me llamó discretamente a un lado y me dijo: “Ten cuidado, he visto a este hombre hacer lo mismo con otras mujeres. Viene aquí, le rechazan la tarjeta y ellas acaban pagándolo todo. Te está timando”.
  Decidí no creerla. Aún estábamos en los inicios de nuestra relación y confiaba plenamente en él; no tenía motivos para no hacerlo. Pero con el tiempo, empezó a hacer trucos similares con más frecuencia. Me di cuenta de que me hacía pagar las compras y otros gastos. La gota que colmó el vaso fue cuando intentó robarme el dinero presionándome para que invirtiera en un plan turbio.
  Rompí con él. Sin embargo, el recuerdo de aquella estancia en el hotel sigue persiguiéndome porque fue el principio de todo, y ojalá hubiera escuchado a aquella chica.

• Me dejé arrastrar por la locura del NFT y me gasté 15 000 dólares en lo que se comercializaba como “la Mona Lisa del Metaverso”. Era, literalmente, un JPEG de un plátano de dibujos animados con lentes de sol. Pensé que estaba invirtiendo en el futuro del arte, y la comunidad que lo rodeaba lo promocionaba como si fuera el próximo gran acontecimiento.
  Un mes más tarde, todo el proyecto se vino abajo, el valor se desplomó a 0 dólares, y ahora solo tengo un meme muy caro que ni siquiera a mi perro le importaría mirar.

• Malgasté mi dinero en una “prueba gratuita” de un suplemento para aumentar la masa muscular. Estaba en mi primer año de universidad y decidí que quería mejorar mi forma física, pero no sabía por dónde empezar. Hice clic en un anuncio que decía que podía ayudar a ganar músculo rápidamente, recibí mi botella gratis por correo y empecé a ver un montón de cargos extraños en mi tarjeta. No me cobraron la primera botella, pero sí una cuota de suscripción.
  Inmediatamente llamé al banco para que bloquearan mi tarjeta, pero para entonces ya había gastado unos 100 dólares que no podía permitirme como estudiante. También seguí recibiendo llamadas de spam y tuve que decirle al representante con firmeza que quería darme de baja. Hoguera / Reddit

Ser niñera es una mezcla de momentos conmovedores, dramas inesperados y situaciones asombrosas. Hemos recopilado historias de la vida real de niñeras que son casi demasiado disparatadas para creerlas.