13+ Pruebas de que trabajar con personas merece una medalla y unas vacaciones anuales en Maldivas

Trabajar con personas puede ser un verdadero desafío. A veces, te encuentras con clientes tan peculiares que solo deseas alejarte lo más posible, pero no es una opción. Y abandonar el trabajo no es una alternativa viable. Precisamente, estas son las historias que compartieron los protagonistas de esta selección.

• En el pasado, me dedicaba a la limpieza de casas. En una ocasión, recibí una llamada para limpiar una residencia, pero me alertaron que el propietario era bastante excéntrico: «Verás, es una persona muy singular. No representa un peligro y es posible mantener una conversación normal con él. Sin embargo, hay dos peculiaridades: nunca usa el mismo par de calcetines dos veces, así que todos los calcetines, excepto los que están en su empaque original, deben ser descartados. Además, tiene la costumbre de hablar de sí mismo en tercera persona. ¿Estás de acuerdo con esto?» Acepté el trabajo porque la paga era buena. Al llegar, el hombre que me recibió me hizo darme cuenta de que era él con quien había hablado por teléfono.
• Hace muchos años, trabajé en una tienda de electrónica. Un día, una mujer entró y solicitó un monitor y un módem para acceder a internet. Intenté explicarle que también necesitaba una computadora, pero se negó a escuchar. Al final, le vendí el monitor y el módem. Así son las cosas. © Apok451 / Reddit
• En mi época de trabajo en una pizzería, hubo una pareja que constantemente se quejaba y exigía que se rehiciera su pedido. Durante mi turno, ordenaron una pizza y luego llamaron para decir: «Queríamos que la pizza estuviera cortada en 10 pedazos, no en 8». Accedí a su petición, pero cuando el repartidor regresó con la pizza «rechazada», ya faltaban tres pedazos de la original. Les llamé para preguntar qué había pasado, y respondieron: «Somos amigos del dueño de su pizzería y nos aseguraremos de que te despidan». Sin perder tiempo, le conté todo al director. Justo en ese momento, la pareja volvió a llamar diciendo: «Acabamos de hablar con el director, te van a despedir». Le pasé el teléfono al jefe, quien dijo: «Habla el dueño de la pizzería. Estoy anotando en su perfil que no recibirán más entregas de nuestra parte». © Adam Gent / Quora

• He trabajado en el sector de servicios por mucho tiempo, pero la clienta de hoy fue un verdadero desastre. Llenó su carrito con 35 artículos y, después de escanearlos todos, me informó que no tenía su tarjeta. Procedí a cancelar la transacción. Luego, se acercó nuevamente y, tras escanear todo una vez más, dijo que estaba esperando a su novio con el dinero. Después de 10 minutos sin que apareciera, tuve que cancelar de nuevo. Unos 15 minutos más tarde, regresó por tercera vez solicitando que escaneara los artículos nuevamente. Pensé que finalmente había conseguido el dinero, pero no, ¡volvió a estar sin dinero! Fue una experiencia frustrante. © rainepets / Reddit
• Trabajé en un centro de llamadas, tomaba pedidos de una variedad de fresa que prometía frutos del tamaño de un puño. Los pedidos eran incesantes hasta que la gente comenzó a recibir plántulas defectuosas por correo: podridas y rotas. La mayoría de los clientes reaccionaron desahogando su ira en nosotros. A pesar de explicar que solo éramos intermediarios y que las quejas debían dirigirse a la empresa de jardinería, continuábamos recibiendo una avalancha de insultos, y no podíamos responder de la misma manera sin arriesgarnos a perder el empleo.

• Hoy, una clienta me hizo llorar. Estaba tramitando documentos para recibir beneficios cuando una mujer empezó a regañarme porque, según ella, no la había ayudado la última vez. Le aclaré que la habían atendido en otra ventanilla, pero insistió en que su solicitud se considerara de inmediato. Le expliqué que solo había disponibilidad para el viernes. Decidió quejarse de mí con el jefe, y al no encontrarlo, comenzó a insultarme. Al irse, me dijo que debería aprender a ser más cortés si quería seguir trabajando con personas. © Outrageous_Fig_3105 / Reddit
• Trabajaba en una gran cadena de tiendas donde teníamos descansos de 10 minutos y 30 minutos para almorzar. Sin embargo, la gente a menudo irrumpía en la sala de descanso del personal exigiendo atención. En una ocasión, un hombre entró mientras yo comía y comenzó a preguntar por la ubicación de los productos. Le indiqué amablemente que buscara a otro vendedor, pero montó un escándalo y me acusó de ser perezosa. © Chloe Paige / Quora
• Como periodistas, buscábamos personalidades interesantes para entrevistar. Encontré a un detective privado que aceptó reunirse. Para mi sorpresa, narraba historias sacadas de películas y libros de espías como si fueran sus propias aventuras. La situación me resultó extremadamente incómoda.

• Un cliente compró unos pantalones en nuestra tienda y al día siguiente decidió devolverlos. Desafortunadamente, los puntos de bonificación que había usado para la compra se perdieron, ya que esas son nuestras políticas. Traté el asunto con cortesía, pero él fue a quejarse con el gerente, alegando que le había gritado, burlado y reído de él con otros empleados. Al final, el gerente le indicó que no podía hacer nada al respecto. Me tomó medio día recuperarme de la situación. Fue realmente incómodo. © CmdrGrayson / Reddit
• Perteneciendo a una familia de comerciantes de tercera generación, contamos con una vasta colección de anécdotas. Por ejemplo, recuerdo que mi abuela, desafiando a la multitud, persiguió a un ladrón que había sustraído una bicicleta de la tienda y ya la había sacado a la calle. Esto ocurrió a finales de los años 50; el delincuente fue entregado a la policía y la bicicleta regresó a la venta. Por otro lado, mi madre, empleada en una librería, suele advertir a las madres despreocupadas que un libro podría caer sobre la cabeza de sus hijos si no prestan atención, lo que generalmente logra que estén más alerta. Personalmente, todavía recordamos a una mujer que solicitó «algún juguete educativo para su hijo que lo mantuviera tranquilo y sin molestar», idealmente hasta que cumpliera 18 años.
• Una amiga mía imparte clases de idiomas extranjeros en un centro infantil. Aunque los niños suelen ser encantadores, los padres presentan todo tipo de actitudes. Algunos esperan que un niño con conocimientos básicos de inglés logre hablarlo fluidamente después de solo 2 o 3 clases, mostrándose verdaderamente indignados cuando esto no ocurre.

• En una ocasión, una mujer llamó para adquirir una impresora. Le sugerí un cable para conectarla al ordenador, pero ella indicó que no poseía uno, necesitaba solo «imprimir algo». Le expliqué que sin un ordenador sería imposible, pero ella insistió, así que procedí a venderle la impresora. Unas semanas más tarde, la devolvió quejándose de que el vendedor no le había informado que necesitaba un ordenador. Afortunadamente, había registrado nuestra conversación en el sistema, evitando así cualquier repercusión negativa. © xorant / Reddit
• Un anciano solía frecuentar nuestra redacción de periódicos. Era inofensivo y se dedicaba a recopilar diversas leyendas urbanas. Tras haberle realizado un par de entrevistas, al parecer se consideró una figura de cierta importancia. Soñaba con publicar su propio libro, aunque todo su material estaba escrito a mano en un montón de hojas manchadas. Quería que yo transcribiera todo en la computadora, pero afortunadamente logré evitar esa tarea.
• Recientemente, el padre de uno de los niños de mi grupo llamó para consultar si era posible trasladar a su hijo a otro grupo o especialidad. Le informé que esa era una decisión que correspondía al director. Prosiguió indagando sobre el apellido del director y cómo localizarlo. Luego preguntó si el director estaba trabajando o de vacaciones. «Está trabajando», le aseguré. El padre inquirió: «¿Y estará en su oficina cuando lleguemos?» Sin embargo, este padre no se presentó en los siguientes 3 días.

Los días laborales pueden ser realmente desafiantes, pero no todo es tan malo. Aquí tenemos historias que demuestran que trabajar con personas no siempre es una pesadilla. A veces puede ser muy gratificante y divertido.