14 Objetos con orígenes tan inciertos como el propio futuro

Si las casas hablaran, tal vez tendrían miles y miles de historias que contar. No solo por los inquilinos que han recorrido cada una de sus habitaciones a lo largo del tiempo, sino también por la innumerable cantidad de objetos que las han adornado o que han formado parte de ellas.

Como en Genial.guru somos muy curiosos, traemos para ti las historias que se esconden detrás de algunos objetos que todos tenemos en casa, y también te contamos cómo han evolucionado a través del tiempo.

1. Tacones altos

Tal vez sea difícil de creer, pero los zapatos de tacón antes eran cosa de hombres. Todo comenzó en el siglo X, cuando las personas que montaban a caballo los usaban en su calzado con fines prácticos, ya que el pie se mantenía más firme en los estribos si el zapato tenía un poco de tacón. Poco a poco, los tacones se fueron convirtiendo en tendencia en Europa y no eran un signo de género.

Eran asociados a la clase alta y su diseño fue evolucionando, de manera que los de los hombres eran anchos y robustos y los de las mujeres, altos y finos. Con el paso de los años, los tacones para hombres pasaron de moda, y cuando se inventó la fotografía, lucían tan bien en las modelos que se volvieron casi en un indispensable.

2. Lentes

Hoy en día, existe una gran variedad de lentes para todos los gustos, ya sea para ver mejor de lejos o de cerca, o para protegernos del sol. Pero antes, por el año 1000, se inventaron unas pequeñas esferas de cristal que se colocaban encima de los textos con letras pequeñas para ampliarlos y facilitar su lectura. Más tarde, se inventaron en Italia unas pequeñas monturas de madera, cobre, cuero y hueso que se sostenían manualmente o se llevaban en la nariz.

Por su parte, lo que hicieron los primeros fabricantes españoles de lentes fue fijarles cintas que se enganchaban en las orejas para evitar que se resbalaran por la nariz. Esto inspiró las patillas modernas, que se apoyan cómodamente en el puente de la nariz y en la parte superior de las orejas.

3. La muñeca Barbie

La muñeca consentida de millones y millones de niñas alrededor del mundo tiene 63 años de vida y fue presentada durante la Feria del Juguete de Nueva York. Su nombre completo es Barbara Millicent Roberts y le fue puesto en honor a Barbara, la hija de su creadora, Ruth Handler, quien se percató de que a su pequeña niña le encantaba jugar con muñecas con características adultas en vez de infantiles. Así que decidió proponerle a su esposo, el cofundador de Mattel, hacer una muñeca con características de mujer, pero su idea fue rechazada.

Sin embargo, el éxito de una muñeca con características adultas en Alemania era tan grande que Mattel compró sus derechos y fue así como finalmente surgió la famosísima Barbie, cuyo primer look consistió en un traje de baño a rayas blancas y negras.

4. El plástico de burbujas

El plástico de burbujas que cubre y protege los productos que compramos originalmente iba a ser un tipo de papel pintado con textura, pero resulta que a un par de ingenieros se les ocurrió pegar dos cortinas de baño y, como resultado, quedaron pequeñas burbujas de aire entre ellas. Felices con su creación, decidieron comercializarla como aislante para invernaderos, pero tampoco funcionó. La suerte les sonrió a ambos en 1960, cuando IBM necesitaba enviar algunos procesadores de datos delicados, y este plástico los protegió muy bien. Con este invento, nació también la tradición de hacer estallar las burbujas individuales: se ha demostrado que es tan relajante como un masaje de 30 minutos.

5. El teclado

En los ratos de ocio, quizá algunos nos hemos preguntado por qué las letras aparecen al azar en el teclado de nuestra computadora y no están en orden alfabético. Bien, pues resulta que no están esparcidas al azar, sino que están ordenadas de acuerdo al diseño QWERTY, que se inventó en 1872 para las máquinas de escribir de la época. Los mecanógrafos escribían tan rápido que sus máquinas se atascaban, así que para evitarlo, se diseñó esta solución. Aunque ya no es necesario aplicar este método, el teclado QWERTY es tan popular que hasta viene incluido en los teléfonos inteligentes.

6. El tenedor

Este utensilio de cocina fundamental antes se consideraba inmoral, antihigiénico y una herramienta del diablo. Sin embargo, a una chica pareció no importarle. Su nombre era María Argyropoulina y era sobrina de los emperadores bizantinos Basilio II y Constantino VIII. Resulta que se casó con el hijo del dux de Venecia. Para el banquete de bodas, llevó un pequeño estuche de tenedores de oro de dos puntas, lo cual escandalizó a los venecianos. Cuando María murió años más tarde debido a la peste, San Pedro Damián proclamó que era un castigo de Dios y cerró el libro del tenedor en Europa durante los siguientes cuatrocientos años.

7. Llaves

Ahora son pequeñas y caben perfectamente en nuestros bolsillos. Sin embargo, las llaves de antes eran enormes y pesadas, tanto que se solían llevar colgadas del hombro. Se usaban para abrir o cerrar las chapas de madera de las enormes puertas de mármol y bronce de los griegos y egipcios, y eran un gran lujo. Dichas cerraduras de madera podían tener un metro de longitud. Menos mal que fueron evolucionando hasta ser más ligeras, y se pueden colgar de un bonito llavero.

8. Servilletas

Son tan prácticas que nos facilitan la vida. Pero las primeras servilletas eran unos trozos de masa llamados apomagdalie, y las usaban los espartanos. Lo que hacían era cortar la masa en pequeños trozos que se enrollaban y se amasaban en la mesa. Una vez listos, podían limpiar hábilmente los dedos sucios, y al final de la comida, les echaban esa masa usada a los perros. Con el paso del tiempo, la masa cruda se convirtió en masa cocida, y el pan servía como cuchara y tenedor, ya que no había utensilios en la mesa griega. Así que el pan se utilizaba discretamente para mantener los dedos limpios. Afortunadamente, en nuestros tiempos la vida es más fácil y ya no tenemos que improvisar.

9. Almohadas

Hoy son unos cómodos cojines rellenos. Pero en el Antiguo Egipto, las almohadas eran más bien pequeños muebles similares a los taburetes de tamaño infantil con una pieza curvada que descansaba sobre un pilar. Estos soportes sostenían el cuello, no la cabeza, quizás para salvaguardar los elaborados peinados que estaban de moda. Lo bueno es que hoy en día, la suavidad sí es prioridad y no hay peinado por el cual se tenga que sacrificar nuestro descanso.

10. Chimeneas

Gracias a los calefactores, ya casi no se usan las chimeneas. Pero antes, permanecían encendidas todo el tiempo, ya que eran una fuente necesaria tanto de calor como de luz. Tanto en las cabañas como en las mansiones, se colocaban en torno a un sencillo hogar abierto, muy parecido a la construcción de una hoguera en el centro de la casa. Las familias de toda Europa se reunían alrededor de la chimenea para cocinar y comer, contar historias y dormir. Era tan esencial para la vida cotidiana que rara vez se permitía que el fuego del hogar se apagara.

11. Billetes de dólar

Un billete de dólar solo dura 18 meses, lo creamos o no. Como el papel moneda se desgasta rápidamente, muchos países utilizan monedas para el equivalente a un dólar. Los billetes de dólar estadounidenses solo duran 18 meses antes de tener que ser retirados de la circulación y sustituidos. Aunque la Fábrica de Moneda y Timbre imprime unos 696 millones de dólares al día, el 95 por ciento de esa cantidad se destina simplemente a sustituir los billetes descoloridos, rotos, sucios o no aptos para la circulación.

12. Agujetas

Aunque los cordones de nuestros tenis son conocidos simplemente como agujetas, la punta tiene un nombre: herretes, y son piezas de plástico o metal que se encuentran en ambos extremos de los cordones de los zapatos. Existen desde la antigua Roma, aunque en aquella época solían ser de piedra o de cristal.

13. Mouse

Ahora lo conocemos como mouse o ratón por ser pequeño y rápido, y porque el cable que lo conecta a nuestra computadora se parece a una cola. Pero los fabricantes de las primeras versiones se referían a este dispositivo como tortuga, con su caparazón duro en la parte superior y las partes móviles en la parte inferior.

14. Control remoto

Aunque no lo creas, el control remoto nació antes que la primera televisión eléctrica, que vio la luz en 1927. Es casi tres décadas más antiguo. Resulta que Nikola Tesla inventó un “teleautómata” que podía controlar ciertos dispositivos mecánicos a distancia con ondas de radio, y lo estrenó en 1898 con un barco teledirigido. Aunque la tecnología no se puso de moda en su momento, la pereza que supuso la invención de la televisión cambió la situación. El primer mando a distancia, comercializado como “Lazy Bones”, estaba unido al televisor por un largo cable, pero tanta gente se tropezaba con él que el mando a distancia inalámbrico, fabricado en 1956, fue un éxito aún mayor.

Ahora es tu turno de contarnos la historia de algún objeto de tu casa. O bien, ¿cuál te gustaría que investigáramos?