18 Personas contaron qué detalles de su trabajo podrían enloquecer hasta a una persona con nervios de acero

Incluso el empleo ideal a veces puede convertirse en una carga. Especialmente si te dedicas a él de la mañana a la noche y te encuentras con algunos clientes que, por decirlo suavemente, no son para nada un regalo. Las siguientes historias demuestran que cualquier trabajo requiere muchos nervios, fuerzas y, a veces, salud.

Genial.guru decidió hablar sobre las molestias de las personas de diferentes profesiones y sobre los detalles que no se le suelen mencionar a los demás.

• Trabajo de optimizadora SEO. Jefe:
  —Nadie visita nuestro sitio web. Aparece en la tercera página de la búsqueda. Tenemos que hacer algo.
  Trabajé como loca para optimizar la página lo antes posible. Los clientes comenzaron a realizar pedidos a través de la página. Yo dije:
  —Jefe, optimicé nuestro sitio, comenzaron a llegar pedidos, el tiempo de visita de la página y las vistas están aumentando. Genial, ¿no?
  —¿Y tú qué tienes que ver con eso? Es solo que la gente recién se dio cuenta y empezó a visitar nuestra página web y a realizar pedidos a través de ella.
  Claro, claro. Para qué considerar mi trabajo. © DerZkayaPlyuha / Pikabu
• La amiga de mi hermana ha sido una famosa modelo profesional durante muchos años. Era alta y delgada y pesaba solo 52 kg. Su agente le aconsejó que adelgazara hasta llegar a los 47 kg. Su grasa corporal ya era mínima, y perder peso significaba perder masa muscular. Como resultado, con un peso de 47 kg, ni siquiera podía caminar una cuadra sin sentirse exhausta. © Thunder_bird / Reddit

• ¿Sabes cómo les dicen a los especialistas en derecho? “No levantan nada que pese más que una pluma”. Siempre me hace reír esa frase cuando llegan demandas que vienen “acompañadas” de documentos del tamaño de una camioneta. Además, toda la responsabilidad recae sobre nosotros, y los plazos son lo peor que uno puede imaginar: saltarse un plazo en la jurisprudencia casi siempre es fatal. © Ilyinskiy / Twitter
• Trabajo en un cine y me encanta. Pero cualquier actividad tiene sus detalles. Hace poco vino un hombre y se llevó dos boletos para la película Nadie. Y después de unos minutos volvió.
  —Oye, chica, ¿es Brad Pitt quien está en el cartel? —señalando el cartel de Nadie.
  —No, es Bob Odenkirk.
  —¡Devuélveme mi dinero! © kinocringe / Pikabu

• En los 90 era DJ nocturno en una pequeña emisora ​​de radio. Tuve llamadas de unas cuantas personas extrañas. A veces parecía que todos los psicópatas de la ciudad escuchaban mi programa. Dos de ellos incluso vinieron al lugar donde se encontraba la emisora. Un día, una recepcionista de Walmart se volvió loca por el hecho de que la habían despedido y comenzó a llamarme, pidiendo que pusiera grabaciones que, según dijo, contenían mensajes de poderes superiores. Entonces me di cuenta de por qué los DJ no usan sus nombres reales. © mchistory21st / Reddit
• Mi esposa es tatuadora. Las llamadas y los mensajes de WhatsApp a las 11 de la noche, a las 2 o a las 5 de la madrugada ya eran comunes. Sobre todo, una vez me “alegró” un tipo que le escribió: “Trabajo como guardia de seguridad en un club nocturno. No tengo tiempo para ir durante el día. ¿Podrías venir a atenderme durante mi turno para hacerme un lobo en la espalda?”. © Anton Kanyuzhniy / Facebook

• Trabajo en las fuerzas del orden público. Y las siguientes cosas son realmente molestas. Cuando después de trabajar hasta las 4 de la mañana tienes que estar presente durante una audiencia antes de las 10. Después de dormir tal vez 4 horas, llegas allí y a las 11 te dicen que la audiencia fue cancelada. Durante muchas semanas trabajas en un caso importante y casi no ves a tus hijos. Y el día en que te encuentras con tu hijo en casa, te dice absolutamente en serio: “Oh, cierto, tú también vives aquí”. Ayudas a una mujer a reemplazar una rueda pinchada de su carro, y ella manda una queja por una mala palabra que se te escapó accidentalmente en el momento en que la mujer tiró las tuercas de la rueda por toda la carretera. © Martin Shirilla / Quora
• Soy peluquero. Una vez vino una mujer y pidió que solo le aplique tintura en las raíces y que las cubra con plástico para que ella pueda irse a casa. Le comenté que éramos responsables por este servicio y que no podía dejarla salir con un plástico en la cabeza. Y la mujer seguía: “¿Y si traigo mi propia tintura?”. Después de una hora, volvió con su hijo, que era el dueño de una pizzería, y la tintura; me fijé el número y le dije que el tono no era el adecuado, que quedaría rojizo en las canas. Le ofrecí hacerlo con mi tintura, pero ella insistió en usar la suya. Muy bien, está usted advertida, señora. Empecé el procedimiento, mientras ella contaba que a la pizzería de su hijo iban personas atrevidas y se quejaban de lo cara que era. ¡Pero por lo bueno hay que pagar bien! Le apliqué la tintura y cuando terminamos, quedó espantada: el cabello había quedado rojizo. Me preguntó si se podía rehacer. Le dije que tendría que cobrar por los dos servicios. La próxima hora y media la pasamos en silencio, y cuando llegó la hora de pagar, casi un tercio de la cantidad me la dio en monedas de 5 centavos. © AtatoraMatushka / Pikabu

• ¿Mi peor trabajo? Cuando trabajé como domador de animales en las fiestas de cumpleaños infantiles. Imagínate estar rodeado por una multitud de niños de 5 años que gritan tratando de agarrar a un hurón asustado. © WwistedtirE / Reddit
• Trabajo como médico en una clínica privada y en un hospital público. Hace mucho que estoy acostumbrado al hecho de que las personas sucias vienen al hospital, con ropa exterior e interior sucia, y ni siquiera le presto atención; después de todo, tenían prisa, estrés y a menudo son solo ancianos solitarios. Pero cuando a la clínica privada vienen personas jóvenes con cita previa, bien vestidas de ambos sexos con un olor persistente a cuerpos que están mucho tiempo sin lavar y ropa francamente sucia, es entonces cuando uno comienza a molestarse. © Oídoporahí / Ideer
• Yo trabajo en un restaurante. Los propietarios no quieren contratar a más empleados, a pesar de que les hace falta personal. Es más fácil para ellos gritarnos y decirnos que somos demasiado lentos. En nuestro restaurante hay alrededor de 30 mesas, cada una tiene capacidad para 4 personas, y solo salen 2 meseros por turno. © suebert / Reddit

• Soy tutora hace ya 25 años. Muchos padres esperan que trabaje gratis o por un centavo. “Mi hija tiene un examen de matemáticas mañana. Se puede ir a una clase gratis para probar, ¿verdad?”. Pero la verdad es que nadie vendrá después de la clase, solo necesitan una preparación para el examen. “Nuestro hijo te adora, y durante el último mes ha logrado un éxito significativo: en lugar de solo cincos, ahora obtiene sietes y ochos. Ahora habrá menos trabajo con él, ¿podemos contar con un descuento?”. No, la verdad es que soy yo quien debería obtener un aumento por mi trabajo. © Andrea Claus Ring / Quora
• Soy profesor. Casi todos los que leen esto han conocido a buenos y malos profesores en su vida. Por lo tanto, siempre hay un montón de expertos educativos a quienes les encanta enseñarle al profesor qué hacer. Debido a eso, cada semana recibo consejos no solicitados sobre cómo hacer mi trabajo, y esta es una de las desventajas de mi profesión. © Matthew Bates / Quora
• Vendo todo tipo de tartas, helados, café. La verdad es que soy una chica muy amable y educada, saludo a los clientes no porque sea mi deber, sino por cortesía. Pero, maldita sea, ¡qué exasperante es cuando estás ahí parada sonriendo y te tratan como si no fueras nadie! Vienen esas personas superimportantes, con la nariz hacia el techo, ignorando por completo el saludo, arrojando dinero sin siquiera mirar, tuteándote. Siempre les doy a esas personas las tartas y los panecillos viejos. © Oídoporahí / Ideer

• Buscaba trabajo con dos días de descanso y que sea de 8:00 a 17:00 como máximo. Encontré un anuncio: se busca un empleado para un comedor, el salario es de 400 USD. Fui ahí a trabajar como cocinera. Maldita sea, nunca había visto una cocina tan sucia en mi vida. Durante una semana limpié las paredes y las mesas con Mr. Músculo, mis manos estaban gastadas. Le dije al jefe que quería renunciar. Aceptó y me preguntó si iría a otro comedor donde la cocina estaba limpia y no había mucho trabajo para hacer. Pero todos los restos de ensaladas y de sopas se recolectan, se congelan y luego... ¡ta-dam! ¡Se prepara una sopa crema! Y yo tengo una posición clara y firme: no cocino lo que no comería yo misma, porque soy cocinera, no carroñera. Ahora no podré comer sopa crema por mucho tiempo. © mawymka / Pikabu
• Entre los 19 y los 20 años, trabajé como maquilladora en el teatro. Una vez me invitó a su casa una actriz para hacer un tratamiento, era una artista conocida y una mujer bastante rica. Cinco veces acordamos dónde y a qué hora, le dije que le había comprado un producto para el tratamiento y le indiqué el precio. Ella dijo: “No me quedaré en deuda”. Trabajé con ella durante 4 horas y después del tratamiento, me entregó unos malvaviscos viejos. © papaKarla / Pikabu

¿Qué detalles de tu trabajo te molestan? ¿Qué profesión crees que es la más estresante y complicada?