Detalles ocultos a bordo de un avión
Los fabricantes de aviones hacen que las alas sean lisas para que el aire fluya fácilmente alrededor de su superficie y la resistencia se reduzca durante el vuelo. Entonces, ¿por qué agregaron estos ganchos amarillos convexos? Obviamente, empeoran la aerodinámica. Sí, es cierto, pero también son necesarios para tu seguridad. Imagina un avión haciendo un aterrizaje de emergencia en mar abierto. Todo marcha bien. El avión se desliza sobre el agua. Los barcos de rescate se dirigen al lugar para evacuar a los pasajeros. Las personas salen por las salidas de emergencia que se encuentran sobre las alas. Antes de que se abra la puerta, el tobogán de escape se infla. Los pasajeros deben caminar por el ala y bajar, pero la superficie del ala está resbaladiza por al agua. Alguien podría caer y lastimarse. Para evitarlo, los comisarios instalan una cuerda de rescate. Fijan un extremo a la puerta y el otro al borde del ala, pasándolo por estos ganchos. Durante la evacuación, todos se agarran a esta cuerda como si fuera una barandilla para evitar caídas.
También pueden asegurar los botes de rescate al ala usando una cuerda y estos ganchos para que el mar no se lleve a las personas lejos del avión. Por cierto, un avión puede permanecer en el agua entre 10 minutos y 60 horas, dependiendo del modelo, las condiciones climáticas y las habilidades del piloto. La salida principal y la de emergencia tienen manijas adicionales para los miembros de la tripulación. Durante una evacuación, los pasajeros podrían entrar en pánico y empujar a los auxiliares de vuelo por accidente. Para evitar una caída, se agarran a estas manijas. El cinturón de seguridad de un avión tiene una función un poco diferente a la de tu auto. Este último te protege de un golpe horizontal. Cuando un avión pasa por una turbulencia, se sacude hacia arriba y abajo. El cinturón de seguridad evita que te golpees contra el techo.
Los miembros de la tripulación cuentan con esposas para los pasajeros problemáticos. Si alguien no se comporta e interfiere con el desarrollo del vuelo, los auxiliares de vuelo tienen derecho a esposarlo a su asiento. Para lograrlo, usan esposas de la policía o bridas de plástico. Eso es lo máximo que pueden hacer durante un vuelo. Después, denuncian a los alborotadores en el aeropuerto y los entregan a la policía tras el aterrizaje. Durante una emergencia, las máscaras de oxígeno caen automáticamente. Tienen un propósito adicional que tal vez no conozcas: igualar la presión y evitar el pánico. La presión del aire puede cambiar debido a las turbulencias. Así que, entre otras cosas, las máscaras ayudan a los pasajeros a mantener la calma. Tu asiento es tu refugio: el chaleco salvavidas que tienes debajo no permitirá que te ahogues. Además, la superficie del asiento está hecha de materiales impermeables. Si el agua entra a la cabina, el asiento impedirá que te congeles, ya que no se mojará. También es resistente al fuego. La cubierta puede evitar que un incendio se extienda por la cabina, pero lo más importante es que puede salvarte de las llamas. Por supuesto, lo más probable es que nunca tengas que utilizar esta función, pero sentirse a salvo es agradable, ¿no?
¡Puedes usar la bandeja del asiento frente a ti como hamaca! Solo tienes que pasar un cinturón, una manta o una toalla alrededor de la mesa y estirar los pies. Tal vez hayas notado los triángulos negros en la pared sobre los asientos. Para ti, un simple pasajero, pueden indicarte los asientos que tienen la mejor vista de las alas. Desde allí podrás tomar las fotos más bonitas del vuelo. Pero los triángulos no fueron creados para tu cámara. Los miembros de la tripulación controlan el estado del avión a través de las ventanillas situadas debajo de estas señales. Supongamos que las alas se congelan, el motor se incendia o el piloto recibe una señal de alerta. En ese caso, la tripulación se dirigirá rápidamente a los triángulos y evaluará la situación. Y ahí estás tú, sentado bajo el triángulo, mirando el ala y pensando: “¿Por qué las alas se encuentran en la parte inferior del avión? Podrían instalarlas encima de las ventanillas o en el centro”. En realidad, algunos aviones las tienen en el centro y más arriba. Y cada ubicación tiene su propia lógica.
El motor y las turbinas están debajo de las alas y, como están cerca del suelo, repararlos es mucho más fácil. Además, en caso de un aterrizaje de emergencia en el mar, las alas actúan como un cojín de rescate y ayudan a mantener el avión en el agua. Los depósitos de combustible vacíos bajo el ala también pueden ayudarlo a mantenerse en la superficie. Pero esta ubicación trae ciertos riesgos. Los escombros pueden meterse en las turbinas mientras esté en la pista. Por suerte, es poco probable que eso suceda, ya que los limpian cuidadosamente. Los aviones con las alas en el centro reciben la menor resistencia del aire. Por eso los aviones de reacción y los supersónicos se construyen de esta manera. Los grandes aviones de carga tienen alas en la parte superior del casco. Gracias a ello, el vehículo se mantiene cerca del suelo, lo que facilita la carga de mercadería. Además, es más seguro aterrizar en pistas no preparadas con alas altas, debido a que los escombros no entran en las turbinas. La aerodinámica de estos aviones funciona mejor gracias a estas alas: enfrentan menos resistencia al aire y entregan la carga más rápido.
El oxígeno de las máscaras es una combinación de productos químicos. El transporte de tanques de oxígeno es demasiado caro para las aerolíneas: ocupan mucho espacio y aumentan el peso, lo que se traduce en un consumo extra de combustible. Por eso, utilizan un generador de oxígeno químico. Se encuentra en el panel sobre la cabeza. Hay un pequeño tanque con compuestos de bario, sodio y potasio. Estos compuestos se mezclan y crean una reacción química caliente que libera oxígeno y lo pasa a la máscara. Los pequeños agujeros en las ventanillas evitan que los cristales se rompan. La presión del aire dentro del avión es mucho más fuerte que la del exterior. La diferencia es tan grande que el aire puede romper el cristal desde el otro lado. Para evitarlo, hacen esos pequeños agujeros. El aire ingresa por ahí y reduce la carga de la ventanilla. Por cierto, tienen una forma redondeada por la misma razón: es ideal para una distribución uniforme del aire. Si fueran cuadradas o triangulares, las corrientes de aire húmedo se acumularían en las esquinas, lo que acabaría por destruir todo. Además, el agua se seca gracias a los agujeros.
Las ventanillas están hechas con un triple vidrio. El cristal exterior soporta la presión, el del medio funciona como un fusible, y la tercera capa protege a la segunda de los pasajeros que tocan la ventanilla. Técnicamente, el avión podría volar con una sola capa, pero sería peligroso. También instalan protección extra para las ruedas, que experimentan enormes cargas durante el aterrizaje. Pero no te preocupes, no reventarán. Los neumáticos pueden soportar una presión entre 5 y 7 veces mayor a la que realmente reciben. ¿Ves el letrero de baño en la puerta? Hay una palanca secreta debajo de él. Los miembros de la tripulación pueden desbloquear la puerta desde el exterior, así que no esperes una privacidad completa. Por supuesto, está prohibido que otros pasajeros lo hagan. La tripulación de cabina puede abrirla en caso de emergencia.
Cuando los auxiliares pasan por la cabina durante el vuelo, siempre tocan los estantes superiores sobre los asientos. No lo hacen para comprobar que los compartimientos de equipaje estén cerrados. En el fondo de estos compartimientos hay unos relieves que los auxiliares usan para no caerse. Es algo muy cómodo, sobre todo para los que no quieren tocar los asientos con pasajeros cuando van al baño. Hay una razón importante por la que instalan las turbinas debajo de las alas. Solían ponerlas en la cola del avión para mejorar la aerodinámica del vuelo. Si uno de los motores dejaba de funcionar, la cabina no se agitaba tanto. Sí, los aviones pueden volar por más que solo funcione una turbina.
Además, las alas eran más delgadas y eficientes gracias a las turbinas de la cola, lo que también era bueno para la aerodinámica. Pero esa ubicación suponía costes adicionales. El motor en la cola era incómodo de mantener. Era instalado en la parte superior, por lo que hacía falta un equipo especial y tiempo extra para su mantenimiento. Y por supuesto, esto afectaba al precio del boleto. Comenzaron a instalar turbinas bajo las alas para ahorrar dinero y tiempo. ¿Alguna vez has notado que las luces de la cabina parpadean antes del despegue? Esto ocurre cuando el piloto desconecta el avión de la red eléctrica del aeropuerto y cambia a la de a bordo. La transición rápida puede provocar el parpadeo.