Cómo la frase “Los hombres no lloran” es dañina, y por qué es importante que los niños sepan expresar sus sentimientos

Crianza
hace 4 años

Como suele decirse, los hombres no lloran, solo riegan sus barbas. En realidad, este chiste esconde un problema social bastante serio. En la sociedad moderna, a veces es necesario explicar que los hombres pueden ser emocionales y llorar. Todos estos clichés, como “los hombres nunca lloran” o “ser hombre significa aguantar el dolor”, han azotado las vidas de muchas generaciones. Pero, parece que ha llegado el momento de dejar estos estereotipos en el pasado.

En Genial.guru decidimos averiguar por qué no se debe negar a los hombres el derecho a sus verdaderos sentimientos.

Cuantas más emociones experimente un niño, más indiferente será de adulto

Los niños, en principio, son más emocionales que los adultos: mientras no saben hablar, necesitan poder expresar sus emociones para ser mejor entendidos. Por lo tanto, no se puede enseñar a los niños pequeños a reprimir sus sentimientos. Los expertos aseguran que, desde una edad temprana, los niños necesitan aprender a experimentar toda la gama de emociones: desde la alegría hasta la tristeza.

Nuestra emocionalidad y capacidad de empatizar es lo que nos hace humanos, así que no debemos decir a los niños que llorar significa ser débiles. De hecho, las lágrimas son una reacción saludable del sistema nervioso a la irritación. Además, con la ayuda de las lágrimas, puedes expresar muchas emociones: vergüenza, culpa, dolor, gratitud, simpatía e incluso alegría. Al privar al niño de la posibilidad de llorar, los adultos impiden que se convierta en una persona emocionalmente madura.

En el futuro, los hombres pueden olvidar cómo expresar sus sentimientos y convertirse en agresores pasivos

Las personas están sometidas a presión de una norma social que prohíbe que los hombres sean vulnerables. Todavía se cuestiona el hecho de que cualquier sentimiento tenga derecho a existir. Por lo tanto, muchos hombres simplemente no saben cómo expresar lo que hay en el interior de sus almas por temor a ser condenados por la sociedad. Como resultado, tenemos a los hombres a los cuales les cuesta decir “Te amo”.

Según una investigación de larga duración, en los últimos 30 años, el nivel de nuestra empatía ha disminuido a casi la mitad. Dicho fenómeno se explica por la actitud de la sociedad que sostiene que un hombre debe ser severo, porque es realmente muy masculino.

Además, los hombres y las mujeres experimentan aproximadamente las mismas emociones y enfrentan problemas similares, solo que los representantes del sexo masculino se ven obligados a ocultar su depresión y ansiedad detrás de la agresión pasiva, la ira y el sarcasmo. Es que las lágrimas alivian el estrés. Si no liberas tensiones, el cuerpo comienza a buscar otras formas de desahogarse. A consecuencia, todos a tu alrededor sufren de este desahogo.

Contener las lágrimas conduce a la depresión y la soledad

En el libro Crying: The Natural and Cultural History of Tears, el autor Tom Lutz asegura que todas las personas se dividen en 2 tipos: “llorones” y “personas con los ojos secos”. Los primeros no se avergüenzan de demostrar sus emociones, y los segundos desprecian las lágrimas, ya que las consideran una forma de manipulación.

De hecho, una actitud despectiva hacia el llanto suele ser la forma en que una persona se protege de tal manifestación de sentimientos fuertes. Es decir, el cerebro parece rechazar estas emociones como indeseables. Esto se llama inhibición emocional que puede convertirse en entumecimiento emocional. En este caso, una persona puede olvidar por completo cómo llorar. El resultado es un estado deprimido, renuencia a hablar sobre los sentimientos con seres queridos, apatía, aburrimiento crónico y depresión. Además, estas personas suelen tener problemas en sus vidas personales, ya que a un hombre que reprime sus emociones cuesta percibir e interpretar correctamente las emociones de los demás.

La supresión de las emociones puede convertirse en una enfermedad

Es importante que los hombres no guarden en su interior todo lo que les molesta, sino que desahoguen lo que se ha acumulado. La prohibición de las emociones fuertes conduce no solo a problemas psicoemocionales, sino también a un deterioro de la salud física. En realidad, es importante llorar.

Las lágrimas, junto con el alivio emocional, pueden proteger el corazón, disminuir la presión arterial e incluso reducir el riesgo de cáncer. Un estado estresante constante conlleva un gran riesgo: en nuestra época, los ataques cardíacos ocurren cada vez más entre los hombres de 40 a 45 años y, en general, la esperanza de vida para los hombres es menor que para las mujeres.

La masculinidad severa ya no está de moda

Afortunadamente, en la sociedad moderna, se siente cada vez más que los hombres de hoy ya no están limitados por tantos estereotipos como antes. La neutralidad de género es una nueva tendencia que permite a los hombres ser lo que quieren. Incluyendo débiles y vulnerables.

Hace poco tiempo, estalló un debate en Twitter sobre la masculinidad tóxica, que afecta negativamente la vida de los hombres. Muchos hombres no quieren corresponder a la imagen anticuada y estereotípica de un hombre brutal que carece de emociones, y es capaz de demostrar a todo el mundo su rigidez y fuerza.

Todos somos personas, y las personas se caracterizan por una amplia variedad de emociones. Hasta hace poco, los hombres que no dudaban en expresar abiertamente sus sentimientos y su amor se llamaban afeminados, pero los hombres tan abiertos luego se convierten en los maridos y padres tiernos, amorosos y afectuosos.

La reacción de la sociedad ante las lágrimas de los hombres

Si profundizas en Internet, puedes encontrar muchas historias relacionadas con la forma en que la sociedad percibe la manifestación de emociones fuertes por parte de los niños varones. Parece que muchas personas aún reaccionan negativamente a las lágrimas y las quejas de los futuros hombres.

Recientemente, una enfermera de los Estados Unidos, Lyra Balearica, publicó un post diciendo que es importante que los niños tengan el derecho a expresar cualquier emoción. La publicación tuvo una gran cantidad de comentarios, y también fue discutida en varios medios de comunicación. Aquí está el post de Lyra:

“Estoy harta de cómo nuestra cultura trata a los niños varones. Hoy estuve con un niño de 11 años que necesitaba hacerse un análisis. Él estaba llorando. No sollozando, ni montando una rabieta; solo eran unas pocas lágrimas por los nervios, fruto de la situación. La mujer que lo acompañaba repetía sin parar: ’Sé un hombre’, ’Deja de portarte como si fueras una niña’. Luego comenzó a amenazarlo con grabar sus lágrimas en un video y mostrarlo a todos sus amigos, un hecho que hizo que empezase a llorar más aún. Le dije que tenemos estrictamente prohibido tomar imágenes y videos allí. Tras eso, ella me acusó de haberle ’arruinado la broma’. Cuando la mujer fue al baño, le dije al niño que expresar sus emociones es algo normal y puede hacerlo siempre que lo necesite. Y que incluso los hombres adultos tienen miedo a las agujas. Y que cada uno tiene sus temores. Y que él es valiente porque tomó la decisión de hacer algo que le da miedo viniendo aquí”.

Entonces la chica llega a la siguiente conclusión:

“Basta de decirles a los niños varones que no son verdaderos hombres si expresan sus emociones. ¿Sabes por qué las mujeres temen a la crueldad masculina? Debido, precisamente, a esta misma actitud hacia los niños varones y hombres, que los reprime. Las lágrimas no te hacen más débil. El miedo no te hace más débil. Pero si regañas a tu hijo por tener miedo o por llorar, eso te hace ser un adulto débil”.

A menudo, tales actitudes hacen que los niños repriman las lágrimas en público o estando con sus amigos. En la red puedes encontrar muchas historias de los padres sobre cómo sus hijos se aguantan las lágrimas para no parecer débiles.

Mi hijo, acompañado por su amigo Andrés, vino de la calle luciendo una herida en la rodilla.
— ¡Ah! ¿Te duele?
— No, mamá, ¡no pasa nada! Me pica un poco.
— Bueno, vete al baño.
Entramos al baño, abro el grifo y mi hijito me dice susurrando:

— Mamá, dile a Andrés que me espere en la calle.

Fui a acompañar a su amigo a la salida. Cuando volví a entrar al baño, mi hijo se echó a llorar, con tanto sufrimiento que incluso me dio miedo.

— Hijo, ¿por qué estás llorando? ¿Qué pasó?

— ¡Me duele mucho! Tenía muchas ganas de llorar, pero no lo hice por los chicos: soy un hombre, y los hombres no lloran nunca.

Cómo enseñarle al niño que las emociones son algo normal

  • Desde la primera infancia, es importante mostrarle al niño que no existen sentimientos incorrectos y que respetas cualquiera de sus emociones.

  • Lean libros juntos. Cuando lees en voz alta, pones muchas emociones en este proceso, y esto ayudará al niño a aprender a empatizar con los protagonistas y a ver la situación desde otro ángulo.

  • El niño debe estar seguro de que puede confiar en ti, entonces la opinión de los extraños no será tan importante para él.

  • También deberías enseñar a los niños a mostrar sus emociones con tu propio ejemplo: no tengas miedo de ser sensible y abierto.

  • No le prohíbas que esté triste y llore, pero al mismo tiempo no lo presiones y no exijas ninguna reacción específica. Forzar al niño a derramar lágrimas y decir que “debe llorar” tampoco vale la pena. Es mejor que estés a su lado demostrando que puedes ayudarle.

  • Lo más importante para cualquier niño es sentir el respaldo de sus seres queridos para que pueda encontrar apoyo emocional en ellos.

¿Cómo te sientes acerca de la frase “los hombres no lloran”? ¿Qué te parece, la sociedad moderna se ha vuelto más tolerante con la manifestación de las emociones por parte de los hombres?

Comentarios

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Para mí es primordial que los niños puedan demostrar sus sentimientos sean cual sean

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Yo sí creo que ahora la sociedad es más tolerante, si buscamos la igualdad empecemos desde que son niños

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