10 Veces en que los padres apartaron la mirada un segundo y se desató el caos

La crianza de los hijos está llena de sorpresas, y a veces basta un momento de distracción para que las cosas se descontrolen. A continuación encontrarás una colección de historias que muestran lo rápido que las cosas pueden pasar de la calma al caos. Ya se trate de un niño pequeño que se mete en líos mientras sus padres están distraídos o de un momento de juego que se convierte en un alboroto salvaje, estas breves historias captan los momentos divertidos e inesperados que ocurren cuando se deja a los niños a su aire... ¡aunque solo sea por un segundo!

• Mi hija Lily tenía tres años. Estábamos en el parque, como siempre, y yo estaba sentada en mi banco habitual, observándola jugar. Por un segundo, aparté la mirada, probablemente para mirar el móvil o responder a una pregunta rápida de otro padre. Un segundo.
  Cuando levanté la vista, ya no estaba. Me dio un vuelco el corazón. Recorrí el patio llamándola por su nombre. No estaba en el tobogán ni en los columpios. Me invadió el pánico. Corrí al arenero, pero nada. Se me pasaron por la cabeza las peores hipótesis.
  Entonces la vi, asomada detrás de un árbol, riéndose como si fuera un juego. Corrí hacia ella, sin apenas poder respirar, y la agarré. Me temblaban las manos y el corazón me latía tan fuerte que podía oírlo en los oídos. Me miró confundida, como si no entendiera por qué estaba tan asustada.

• Yo estaba en la universidad y tenía una reunión del club. Algunos de los participantes eran estudiantes no habituales con un niño pequeño, y tenían al niño allí en ese momento. Bueno, no era para tanto; estaba muy entretenido por sí solo.
  Los padres intentaban prestar atención a lo que ocurría, como el resto de nosotros, cuando uno de ellos saltó de la silla gritando y agarró al niño. Resulta que el pequeño había estado jugando con las llaves de su padre y se dirigía con ellas a la toma de corriente. © shaodyn / Reddit

• Cuando nuestra hija tenía unos 3 años y nuestro hijo, 2, mi mujer fue al garaje a sacar una pizza congelada del congelador. Uno de los niños, no sé cuál, cerró la puerta y la dejó encerrada. Golpeaba la puerta y podía oír a los traviesos riéndose de ella dentro.
  A mi mujer no le hizo gracia; agarró un destornillador plano de mi caja de herramientas y consiguió desbloquear la puerta. Todo esto le llevó unos 15 minutos. Cuando volvió a la casa, estaban en su habitación viendo dibujos animados y comiendo galletas que habían conseguido robar.
  La habrían dejado ahí fuera toda la noche. Desde entonces tenemos una llave de repuesto escondida en el garaje. © 1980pzx / Reddit

• Mi hijo tenía 3 años. Estábamos saliendo del supermercado cuando se me perdió de vista mientras ajustaba las bolsas... unos dos segundos, como mucho. Buf. Desapareció.
  La tienda se cerró, y todos estábamos buscándolo. La gente revisaba los coches fuera. Yo gritaba el nombre de mi hijo más fuerte que cualquier sistema de intercomunicación. Estábamos a punto de llamar a la policía cuando mi hijo pequeño se escabulló de la zona de los carritos y se puso en plan: “¿Qué pasa?”.
  Decidió que sería una idea brillante meterse debajo de los carritos y sentarse allí mientras el mundo giraba al revés, buscándole. Lo abracé y le grité durante 10 minutos, sollozando feamente.
  Estaba agradecida a mis amigos del supermercado. Les servimos el almuerzo como un enorme “gracias”. © Italics12 / Reddit

• Yo solo tenía 2 años. Mis padres fueron de excursión a la playa. Estaban distraídos con mi hermano y no se dieron cuenta de que me había metido en el agua.
  Cuando miraron hacia arriba, lo único que vieron fue mi gorro flotando. Mi padre se precipitó al mar y descubrió que yo seguía llevando el gorro, pero que de alguna manera yo flotaba completamente vertical, con solo el gorro asomando por encima del agua. © lankymjc / Reddit

• Tenía la puerta abierta para que los de mantenimiento pudieran entrar y salir mientras trabajaba en algo. Mi hija y yo oímos que se encendía la tele y, efectivamente, había una niña rubia con unas coletas muy monas sentada viendo dibujos animados.
  Resultó que la niña se había colado en mi piso. Me imagino el susto que se habrán llevado sus padres. © GarbageDayyyyy / Reddit

• Me alejé para ir al baño y dejé a mi recién nacido dormido en una manta en el suelo, acurrucado sobre una alfombra grande y mullida. Mi hijo de 3 años estaba viendo la tele cerca.
  Cuando volví, me sorprendió encontrar al bebé literalmente enrollado en la alfombra como un bultito, con mi hijo pequeño sentado encima y un cojín debajo como medida de seguridad. Todavía no me explico cómo pudo hacerlo tan rápido, y cómo el bebé estaba completamente tranquilo e ileso. © peripateticpeople / Reddit

• Había llevado a mi hija de cuatro años a un baño público en Francia, que estaba al lado de una carretera principal. Al salir, la solté de la mano durante una fracción de segundo para cerrar la puerta. Cuando miré hacia atrás, estaba corriendo hacia la calle porque había visto a su madre al otro lado.
  Desde donde yo estaba, la carretera estaba tapada, así que no podía ver si venía algún coche, y ella había ido demasiado lejos para que yo pudiera alcanzarla. De milagro, cruzó la carretera sana y salva. Me entran escalofríos al recordar el terror que sentí al verla en medio de la carretera. © Goose-rider3000 / Reddit

• Mi padre nos estaba viendo a mis dos primos y a mí jugar al videojuego en el estudio cuando se levantó para ir al baño. De alguna manera, en los 2 o 5 minutos que estuvo fuera, habíamos puesto a uno de mis primos en la cinta de correr, la habíamos inclinado cuesta abajo (estoy bastante seguro de que somos la razón por la que las cintas de correr ya no tienen estas características) y habíamos subido el dial hasta la velocidad máxima.
  Mi padre llegó justo a tiempo para ver cómo mi primo y yo lanzábamos a nuestro otro primo metro y medio por los aires contra la pared. No se preocupen, no se rompió nada, pero intentar explicar por qué mi primo tenía un gran chichón en la cabeza metió a mi padre en un buen lío. © unctuous_homunculus / Reddit

• Nos mudamos a nuestra nueva casa en Halloween de 2001. La mayor parte del trabajo pesado estaba hecho, así que mi mujer decidió empezar a desembalar las cosas importantes mientras yo llevaba a nuestra hija de 8 años a pedir caramelos. Salimos y me di cuenta de que me había dejado el teléfono.
  De pie en el porche, le dije: “No te muevas, tengo que tomar el teléfono. Ahora vuelvo. No te muevas”. Se movió.
  Era un barrio nuevo, con niños y padres por todas partes. Corrí frenéticamente calle arriba y calle abajo y, al cabo de unos 15 minutos, vi a una familia -mamá, papá y un puñado de niños- con la mía a cuestas.
  Se rieron mucho y me dijeron que se habían dado la vuelta y allí estaba ella, que había aparecido de la nada. Decidieron quedarse cerca, suponiendo que algún padre histérico acabaría viniendo corriendo. © catching_comets / Reddit