21 Novios y maridos tan tacaños que mejor perderlos que encontrarlos

¿Alguna vez te has sentido como si estuvieras arrastrando un elefante por un sendero empinado cuando tratas de que una persona tacaña comparta algo contigo? ¡No estás solo! La mayoría de nosotros hemos conocido a alguien que se guarda el pastel entero o te invita a comer a su casa y solo te ofrece agua del grifo. Aunque no entendamos del todo su comportamiento, lo cierto es que este tipo de gente siempre da que hablar, y a su alrededor se generan historias que, más tarde, nos causan risa. Como les ha sucedido a nuestros lectores, quienes tuvieron que lidiar con un mezquino en su vida.
De este tipo de historias hay por miles. Lamentablemente, la mezquindad es un defecto común, y muchas veces no nos damos cuenta de que alguien cercano, como un novio o un cónyuge, lo tiene, hasta que es demasiado tarde. Batallar con estas personas no es fácil, pero al final, quedan las anécdotas graciosas. Como nosotros no somos tacaños, las compartimos contigo: uno, dos.