La noche era oscura y aterradora. Unos cientos de personas estaban sentadas en botes salvavidas, sin saber qué pasaría después o cómo serían sus vidas a partir de ese momento. Todo lo que sabían era que el barco gigante en el que habían estado navegando solo un par de horas antes había desaparecido frente a sus ojos. Estaban solos, esperando ayuda. ¿Vendría alguien? No sabían si el resto de los botes que viajaban relativamente cerca de ellos habían escuchado su llamada de ayuda. No había nada más que hacer, sino esperar. El Titanic, un iceberg y una noche. Es uno de los hechos más famosos de la historia moderna, del que todo el mundo habla incluso ahora, más de 100 años después.
¿Alguna vez te has preguntado cuánto queda del Titanic en estos días? Bueno, si no has estado viviendo debajo de una roca, probablemente sepas que han pasado más de 100 años desde que el barco más famoso del mundo naufragó. El RMS Titanic, el transatlántico más grande del mundo de principios del siglo XX, se hundió durante su viaje inaugural, solo unos días después de zarpar del puerto. El barco chocó contra un iceberg el 14 de abril de 1912, llevándose a más de 1500 pasajeros de los más de 2200 que estaban a bordo del transatlántico. Por impactante que parezca, el Titanic tardó más de tres años en construirse y solo tres horas en hundirse. Hoy en día, la construcción del barco habría costado más de 210 millones de dólares.
Era el 12 de septiembre de 1990. En aquellos tiempos, mucho antes de la mensajería instantánea y las llamadas por Zoom, una niña buscaba amigos por correspondencia. Zoe estaba a bordo de un barco de Inglaterra a Bélgica, de vacaciones con sus padres. Tenía solo 10 años en ese momento, pero era una colegiala muy inteligente. Tomó un pedazo de papel y comenzó a juntar algunas palabras. Se presentó y luego escribió que le gustaba el ballet, tocar la flauta y el piano. Por supuesto, no pudo evitar mencionar a sus dos adoradas mascotas, un pequeño hámster al que llamó Sparkle, y su pez, Speckle. También anotó la dirección en la que se la podía localizar en caso de que alguien estuviera interesado en responderle. Pero, por desgracia, ella estaba en el mar. ¿A quién podría enviarle este mensaje?
Era el barco más grande jamás construido en su época y se suponía que era insumergible. Pero a los pocos días de emprender su primer viaje en 1912, el Titanic desapareció bajo las implacables olas del Atlántico Norte. Y de sus más de 2200 pasajeros y tripulación, solo 706 sobrevivieron aquella terrible noche. ¿Le habría ido mejor a un barco más pequeño en la misma situación? ¿Importó en verdad el tamaño del iceberg al final? ¿Fue un error que el barco cambiara de rumbo en el último momento para evitar el impacto? Estas son tres preguntas que tienen a la gente pensando: “¿Y si?”.
Conoce a Arthur John Priest. No, no es famoso por haber sido pintor ni por haber descubierto un tesoro perdido hace mucho tiempo. No inventó ningún dispositivo genial ni rompió ningún récord mundial. No, Arthur John Priest es famoso simplemente por ser “insumergible”. Demostrando que se puede tener suerte y mala suerte al mismo tiempo, Priest estuvo involucrado en varios eventos desafortunados en el mar y sobrevivió a ellos, incluido el fatídico viaje inaugural del Titanic. Priest no era un hombre rico e interesado en navegar por placer, formaba parte de la clase trabajadora. Había sido contratado como fogonero, lo que lo llevó a pasar horas y horas en las entrañas calientes de los grandes buques de vapor. Su trabajo era sucio y difícil: era responsable de mantener las calderas encendidas, alimentándolas con carbón y asegurando que se produjera suficiente vapor para que los motores funcionaran. Debía tener cuidado de no sobrecalentar el sistema ni incendiar el barco.
Permanecer mucho tiempo en aguas de 20 °C no le hará ningún bien a tu salud. Las aguas con una temperatura de 10°C son una pesadilla, ya que se sienten mucho más frías que el aire de la misma temperatura. Los pasajeros del Titanic viajaban sobre aguas de −2 °C. ¿Puedes imaginarte el frío que hacía? Incluso el iceberg con el que se encontró el Titanic era más cálido; el agua no se congeló debido al alto contenido de sal. Pero ¿qué tal si la temperatura hubiera sido más alta? ¿Qué pasaría si el Titanic se hubiera hundido en agua caliente, a unos 50 °C? En teoría, esto podría haber ocurrido si las aguas del Atlántico Norte se hubieran encontrado con una corriente submarina cálida procedente del sur del océano el día del desastre, pero este calor no habría sido suficiente.
Hace más de un siglo, el Titanic chocó contra un iceberg y se hundió hasta el fondo del Océano Atlántico. De las 2.240 personas a bordo, solo sobrevivieron unas 700. Desde entonces, la tragedia ha sido objeto de un sinfín de películas, documentales y libros. Y aunque hemos aprendido mucho sobre el barco y sobre las muchas de las personas a bordo, apenas sabemos sobre el iceberg responsable de la catástrofe, ¡absolutamente nada sobre su tamaño! Pero tal vez podamos encontrar algunas pistas...
“Hemos vivido juntos durante muchos años. Donde tú vayas, yo voy ”... Estas fueron las palabras que Ida Straus le dijo a su esposo. ¡Una de las mujeres más ricas del Titanic no terminó en un bote salvavidas! Ida decidió quedarse con su amado Isidor. Momentos antes, le dio a su doncella un regalo precioso... que probablemente le salvó la vida. Isidor e Ida Straus nacieron en Alemania y emigraron a los Estados Unidos cuando eran niños. Se conocieron en Nueva York y se casaron 5 años después. La pareja tuvo siete hijos, ¡pero afortunadamente ninguno de ellos estaba en el Titanic!Isidor trabajó para la tienda de su padre en su adolescencia. Luego, comenzó un negocio de loza y porcelana con su hermano que creció hasta convertirse en el departamento de cristalería en Macy’s. Finalmente, los hermanos se apoderaron de toda la tienda departamental y se volvieron multimillonarios. Isidor e Ida eran bien conocidos en Nueva York por su riqueza, caridad y su increíble amor y devoción el uno por el otro. Siempre que Isidor realizaba un viaje de negocios por Estados Unidos o Europa, su esposa lo acompañaba. Cuando ella no podía, se escribían largas cartas todos los días.
10 de abril de 1912. Estás en la costa del océano Atlántico, en una pequeña ciudad portuaria. Cientos de personas, y tú entre ellas, van a embarcar en el enorme y majestuoso barco. Es tres veces más largo que la altura de la Estatua de la Libertad. El navío está considerado como la embarcación más avanzada e insumergible de su tiempo. Se pueden ver cientos de ventanas de camarotes de lujo en su cubierta, y la inscripción “Titanic” en el magnífico casco de hierro.Este día, el famoso transatlántico partió en su primer y último viaje desde Southampton a Nueva York. Pero ahora, verás una historia alternativa. Puedes escuchar a un miembro de la tripulación anunciando el inicio del viaje del Titanic. El barco navega desde África hasta las Bermudas. Y la causa de su catástrofe no será en absoluto un iceberg.Durante 4 días, el Titanic navega por aguas del Atlántico Norte. El sol calienta tanto el navío que durante el día todos los pasajeros se sientan dentro del barco. Por la tarde, cuando una brisa fresca desciende sobre el océano, toda la gente sube a cubierta para contemplar el hermoso rojo atardecer.
Todos conocen la película del Titanic o, al menos, escucharon de ella. Pero lo que muchos no saben es que existen registros fotográficos de la nave días antes del suceso. Estas fotos fueron tomadas por un sacerdote llamado Francis Browne que, por un pequeño cambio de planes, bajó del barco y conservó los negativos en el sótano de su residencia por muchos años. Es por eso que hablaremos de él, de cómo descubrieron sus fotografías y cuáles son las semejanzas con la cinta estrenada en los noventa.
El nombre del Titanic es conocido universalmente, ya sea por la película que rompió récords o por las historias que han surgido alrededor de su trágico hundimiento. Durante muchos años se ha especulado sobre la verdadera razón de la tragedia. Algunos han contado historias de siniestras señales de mala suerte que supuestamente fueron ignoradas de antemano, mientras que otros han elaborado teorías de conspiración para explicar la razón “real” por la que se hundió.
Todos sabemos por libros y películas que el Titanic se hundió debido a un iceberg, pero hay algunas pruebas recientes que dicen que hubo explosiones e incendios y que eso hizo que el barco se hundiera. Esto cambia la historia. Revisemos algunos hechos que pueden arrojar algo de luz sobre estas nuevas circunstancias.
Brynjar Karl Birgisson es un niño que padece autismo, cuya historia se ha vuelto viral porque es un ejemplo de lo que una persona puede lograr cuando se lo propone. Brynjar se siente fascinado por la historia del Titanic, el famoso barco que se hundió en 1912, y decidió hacer una réplica usando bloques de Lego.
Hace más de 105 años, el Titanic emprendía su primera y última travesía. A bordo se encontraban muchísimas personas adineradas de aquella época que llevaban incontables riquezas y obras de arte valuadas en millones de dólares al Nuevo Mundo. ¿Cuáles son los tesoros legendarios que reposan en el fondo del Océano Atlántico y por qué nadie hasta ahora ha logrado sacarlos a la superficie?
Kathy Bates, la querida actriz conocida por sus papeles en Misery y Titanic, ha anunciado su retiro de la actuación. En una emotiva entrevista, Bates compartió sus razones y reflexiones sobre una ilustre carrera que abarca décadas.
Dirigida por James Cameron, esta epopeya romántica nos sumerge en la majestuosidad del famoso naufragio, entrelazando destinos en una historia de amor eterno. Con un elenco estelar y efectos visuales revolucionarios, Titanic no solo rompió récords de taquilla, sino que dejó una huella imborrable en la cultura popular.
Era el 10 de abril de 1912. Richard acababa de partir de Southampton, Inglaterra, a bordo del barco más famoso de la época, apodado “el insumergible”. Como acababa de presenciar lo que había estado a punto de ser una colisión con el SS City of New York, decidió escribirle a su mujer para informarle del desafortunado y aterrador suceso. “Mi querida Sal”, escribió, “ayer nos salvamos de varios problemas...”. No sabía que, apenas 4 días después, tanto su pluma como el barco en el que viajaba se perderían para siempre en el fondo del océano Atlántico Norte. ¿Acaso esto era especie de mal presagio? ¿Acaso Richard previó lo que le sucedería a su barco?
Los constructores del Titanic pensaron que el barco podría mantenerse a flote durante varios días en caso de un accidente. Sin embargo, el transatlántico se hundió en menos de tres horas y quizás pudo haberse evitado si se hubieran tomado otras medidas preventivas. Por ejemplo, se sabe que además de ignorar las advertencias de hielo en la zona, la detección del iceberg se vio dificultada por la falta de binoculares de vigilancia y otros factores que ahora conocemos.
Es el 10 de abril de 1912, un soleado día de primavera. Eres uno de los pasajeros de primera clase a bordo del Titanic, justo cuando el barco está a punto de partir de Southampton. ¡Imagina la emoción de todos, el aire fresco de primavera, los sonidos del mar! Estás paseando por la cubierta más alta del Titanic cuando ves varios botes salvavidas. Cuando empiezas a contarlos, recuerdas la capacidad del barco. Es de poco más de 3.000 personas. Espera, pero ¿hay suficientes botes salvavidas para todos a bordo? Veamos los números. El Titanic podría llevar un total de 64 botes salvavidas, un número que fácilmente podría haber ayudado a salvar a todos los pasajeros a bordo. El diseñador jefe Alexander Carlisle planeó equipar el barco con 48 botes salvavidas, pero el Titanic terminó con solo 20.
Dice el refrán que: “El tonto grita, el inteligente opina, y el sabio calla.” Pero entonces, ¿qué hacer cuando el tonto se siente genio y habla con tal seguridad que dudamos de nuestra propia inteligencia? Nuestro cerebro aborda un vuelo directo al mundo del revés. Sin embargo no hay nada más divertido que la comedia involuntaria, como nos lo demostraron estas personas.
Debo decir que sería difícil visitar la cascada más grande del mundo, porque está bajo el agua. Hay fisuras y cavernas en el fondo del océano. Se forman cuando el agua rezuma a través de las capas de sal que hay debajo. Esta está llena de sal disuelta, lo que hace que sea más densa que el agua que la rodea, por lo que acaba asentándose en estas fisuras. Este tipo de agua densa forma una cascada masiva cerca de Dinamarca. Es una cascada gigante que cae 3500 m en picada. Eso es más de tres veces la altura del conocido Salto Ángel en Venezuela. Bueno, el agua más fría de esta cascada se hunde después de chocar con el agua circundante, que es menos densa.
¿Qué crees que se encuentra en el fondo del océano? ¿Qué pasaría si te dijera que, junto con los restos del Titanic y misteriosos animales submarinos, los fondos oceánicos han enterrado en su interior más de 20 millones de toneladas de oro? Loco, ¿verdad? Al parecer, ese oro es de difícil extracción y nadie ha intentado sacarlo. Pero si se extrajera, cada humano vivo en el planeta podría recibir 4 kg de oro. Ahora, ¿te imaginas eso? En 2016, durante una subasta en un gran mercado de pescado en Tokio, Japón, una especie de atún rojo en peligro de extinción se vendió por 14 millones de yenes, lo que equivale a más o menos 117 000 dólares estadounidenses. Y ese ni siquiera fue el pescado más caro jamás vendido.
Abril de 1912 marcó una de las tragedias más terribles de la historia del mundo. El barco insumergible, la cúspide de la ingeniería de la época, el enorme Titanic, se hundió. En esa oscura noche sin luna, el transatlántico tuvo varias oportunidades de salvar a sus pasajeros. Había otro barco a pocos kilómetros que podría haber salvado al Titanic, pero no lo hizo. No era un barco fantasma, y no es una leyenda o una teoría, sino una realidad documentada. Hay registros y declaraciones de testigos que lo confirman. Pero ¿por qué no ayudó? Averigüemos lo que ocurrió aquella noche analizando los acontecimientos desde tres puntos de vista diferentes. Comencemos por la versión del Titanic.
Catorce años antes de la tragedia del Titanic, se publicó una novela cuyo título ya nos perturba: El hundimiento del Titán. Esto se suma a las ya incontables leyendas, creencias y mitos que hay sobre el Titanic, algunos de los cuales hasta hablan de maldición. Lo cierto es que más allá de lo que se diga, esta novela narra una historia cuyas similitudes con la realidad no parecen puras coincidencias. Léelas tú también y luego nos das tu opinión.
En 2017, más de 25 millones de personas embarcaron en cruceros a lo largo del mundo. ¡Por si no lo sabías, eso es más que la población total de Grecia! Se ha convertido en la opción favorita de los Estados Unidos a la hora de irse de vacaciones, y es fácil ver por qué subir a un crucero es más popular cada año. Los cruceros también están ganando presencia entre las nuevas generaciones. Dos tercios de los millennials y la generación Y afirman que los cruceros son su nuevo tipo de vacaciones preferido. ¿Cómo puede ser? Bueno, veamos. Es fácil de planificar. Una vez a bordo, puedes encontrar actividades para todos los miembros de la familia. Y tienes la oportunidad de visitar varios destinos diferentes en un solo viaje. ¿Una ventaja adicional de viajar en crucero? Puedes conocer varios destinos para un futuro viaje.
Cuando vemos algunas de nuestras películas favoritas, podríamos soñar con lo emocionante que sería grabar algunas de sus más icónicas escenas, ya sean romances intensos o aventuras extremas. No nos damos cuenta de que quizá para ellos no fue algo ni sencillo, ni agradable. De hecho, algunos de los actores en esta lista, recuerdan estas escenas como las más difíciles de grabar en sus carreras.
14 de abril de 1912. Una fría noche en algún lugar del Atlántico Norte. A bordo del barco más moderno e insumergible, el Titanic, se celebra una cena. Dos hombres bien vestidos están sentados en una de las mesas. Uno de ellos es un famoso periodista británico. Le cuenta a su interlocutor una historia interesante y al mismo tiempo terrible. Todo comenzó alrededor del año 1000 a. C. en el Antiguo Egipto. En aquella época, nació una mujer en la ciudad de Tebas. Nadie sabía quién era ni a qué se dedicaba, pero tenía una alta posición social. Hacia el final de su vida, fue proclamada sacerdotisa del Colegio de Amen-Ra.
14 de abril de 1912. El Titanic se estrelló contra un enorme iceberg y se hundió. Sip, ya lo hemos abarcado. Pero ¿y si esta vez utilizamos el hielo para llevar el barco a la superficie? Esto requiere varios miles de metros de malla metálica y un montón de nitrógeno líquido. Nuestro objetivo es meter al Titanic en un enorme bloque de hielo que eleve al barco a la superficie.Para ello, hay que rodear el pecio en la red metálica y cubrirlo con nitrógeno líquido. El primer problema al que te enfrentas es la imposibilidad de envolver el barco completamente. Tienes que levantarlo un poco de alguna forma para poner la malla debajo de él. Digamos que por algún milagro lo consigues. Luego, necesitas transportar cientos de grandes tanques de nitrógeno líquido. Estás bajo el agua, abriendo los depósitos y... hace tanto frío que el agua helada del océano Atlántico luce como si estuviera hirviendo. El nitrógeno solo chisporrotea, se disipa, y ciertamente no crea un bloque de hielo alrededor de la red.
Te sientas en la cama, pones los pies en el suelo y sientes el agua fría. Sales corriendo del camarote y te encuentras en un largo pasillo. El líquido te llega hasta las rodillas, la gente se pone los chalecos salvavidas y corre hacia las escaleras. Corres tras ellos y te encuentras con el caos.El agua está por todas partes. Una mujer resbala en las escaleras y se cae. La ayudas a levantarse. La gente te empuja desde todas partes. Todos intentan subir las escaleras. Hay más agua detrás de ti. La cabina que acabas de dejar está completamente inundada. Unos segundos más y el nivel del agua subirá por encima de tu cabeza. Afortunadamente, todos logran salir.
Han pasado 110 años desde que se hundió el Titanic. El naufragio más famoso del mundo está envuelto en misterio. Tanto así que continúa fascinando a buzos, científicos y fanáticos en todo el mundo. Pero sospecho que estas personas tienen una razón para esto. Desde que se hundió el Titanic, las expediciones han rastreado las aguas profundas del océano Atlántico Norte para localizar los restos del naufragio. Este fue descubierto recientemente, hace solo 37 años. Pero desde entonces, varias expediciones siguen descendiendo hasta allí para explorar y revisar los restos. En 1998, un buzo conocido como Paul Henry Nargeolet localizó una extraña señal cerca del naufragio del Titanic. Usando un sonar, recibió señales claras de que algo enorme estaba en el suelo del océano Atlántico cerca de donde se encontraban los restos del naufragio. Durante 26 años, nadie pudo identificar el origen de la señal.
Abril de 1912 marcó una de las tragedias más terribles de la historia del mundo. El barco insumergible, la cúspide de la ingeniería de la época, el enorme Titanic, se hundió. En esa oscura noche sin luna, el transatlántico tuvo varias oportunidades de salvar a sus pasajeros. Había otro barco a pocos kilómetros que podría haber salvado al Titanic, pero no lo hizo. No era un barco fantasma, y no es una leyenda o una teoría, sino una realidad documentada. Hay registros y declaraciones de testigos que lo confirman. Pero ¿por qué no ayudó? Averigüemos lo que ocurrió aquella noche analizando los acontecimientos desde tres puntos de vista diferentes. Comencemos por la versión del Titanic.
A las 11:40 p. m., el Titanic hizo contacto con un iceberg en el océano Atlántico Norte. Se encontraron y restauraron muchos artefactos, como partes del barco, joyas y platos, por nombrar algunos. La embarcación tardó aproximadamente 3 horas en sumergirse por completo en las remotas aguas heladas. La noche era fría y muy viva. La orquesta tocaba música y encantaba a los invitados a bordo. Todos estaban emocionados de llegar a Estados Unidos. Todavía se consideraba una hazaña increíble que un barco cruzara el Atlántico en 1912.
14 de abril de 1912. La noche oscura se llenó de horribles sonidos de un recipiente de metal gigante que se partía en dos. El barco más grande de esa época chocó con un iceberg que se encontraba en su camino. El Titanic. Una de las historias más grandes del siglo XX de las que la gente todavía habla. El lado de estribor del barco gigante rozó el iceberg. Eran las 11:40 p. m. cuando las cosas empezaron a ir mal. Este iceberg causó suficientes daños como para que al menos cinco compartimentos del casco comenzaran a llenarse de agua
En la noche del 14 al 15 de abril de 1912, el barco más moderno e insumergible chocó con un iceberg y se hundió. Y fue increíblemente aterrador. Imagina un enorme crucero, varias veces del tamaño de la Estatua de la Libertad, chocando con un enorme trozo de hielo y hundiéndose. Está oscuro y frío. Lo único que se oye es el estruendo y el rechinar del metal y la madera al romperse. Todo lo que te rodea son las aguas heladas del interminable océano Atlántico. Casi no hay conexión con el mundo exterior. No hay teléfonos ni Internet; nadie más en todo el planeta sabe que el barco se está hundiendo. Es una auténtica pesadilla.
¡La tierra se está partiendo mágicamente por la mitad! La línea que conocemos como el ecuador ya no es imaginaria. Se acaba de convertir en un cañón muy real y enorme, que va de lado a lado, ¡y ha dividido perfectamente esta gran bola azul en dos! Este cañón, que ahora es parte de la Tierra, es más profundo que la fosa de las Marianas y, de hecho, en él incluso podrían caber 2 de ellas, de arriba abajo. La fosa de las Marianas tiene casi 11,3 km de profundidad y, hasta ahora, es el lugar más profundo conocido, no solo en los océanos, sino en todo el planeta. Es decir, antes de que apareciera este cañón. El cañón tiene una profundidad de 24,1 km, eso es muy profundo. ¡También es muy ancho! Podría contener al menos tres campos de fútbol de un lado a otro. Eso deja mucho espacio para que sucedan cosas allí.
El amor romántico ha sido un tema recurrente en la literatura, el cine y la televisión, y ha sido representado de diversas formas a lo largo de la historia. Sin embargo, hay ciertas parejas ficticias que han logrado trascender la pantalla y se han convertido en íconos de lo que significa el amor romántico. Aquí te presentamos una compilación de algunas de estas parejas, explorando las razones por las que se han ganado un lugar especial en el corazón del público y cómo han ayudado a moldear nuestra comprensión de que el amor romántico puede ser desgarrador, apasionado, complicado y hermoso, todo al mismo tiempo.