14 Objetos que no deberían estar en ningún dormitorio decente

hace 3 años

Сada persona pasa en promedio alrededor de un tercio de su vida o incluso más en un dormitorio, y por lo tanto, esta habitación debe estar decorada para que sea agradable estar en ella. Seguro que te ha pasado entrar en un cuarto de hotel y pensar: “Dios, ¡qué bien que lo hicieron!”. Tratemos de que tu propio dormitorio te genere la misma sensación.

Genial.guru estudió blogs de diseño (y otras cosas más) e hizo una pequeña guía de errores comunes en el diseño de dormitorios.

1. Colores magenta, rojo o blanco en el diseño

Los colores tienen la capacidad de influir en el estado de ánimo e incluso en el comportamiento humano. Un tono determinado de color nos puede persuadir para que compremos algo, hacernos sentir seguros o, por el contrario, ponernos nerviosos. Del mismo modo, la combinación de colores del dormitorio puede tener una relación directa con nuestro bienestar.

Los tonos apagados propician un estado de relajación y un sueño reparador. Entre un acabado mate y uno brillante, es recomendable elegir el primero.

Se considera que el mejor color para un dormitorio es un azul apagado. Seguido por:

  • verde
  • amarillo pálido
  • beis

Las peores opciones son magenta, blanco y rojo.

2. Muchas almohadas

Las almohadas pequeñas en un sofá o en una cama brindan una sensación acogedora, pero a la vez generan molestias. Imagina: cada vez que quieres irte a la cama, debes sacarlas y guardarlas en algún lugar, y por la mañana, por el contrario, volver a colocarlas y organizarlas maravillosamente. Demasiado lío.

Para un sueño cómodo, necesitas una sola almohada, puedes deshacerse del resto tranquilamente. Si deseas agregar una segunda almohada, es porque elegiste la almohada incorrecta. Lo más probable es que la que tienes no sea demasiado grande.

3. Cesto con ropa sucia

Primero, cada vez que tu mirada se fija en un montón de ropa sucia, tu cerebro lo percibe como un problema que debes resolver lo antes posible. Esto puede dificultar tu relajación. En segundo lugar, la ropa sucia huele mal y empeora el aire del dormitorio.

4. Colchón viejo

La mayoría de las personas no se dan cuenta de que los colchones tienen una vida útil: generalmente duran entre 8 y 10 años. Y te sorprenderá saber que muchos de nosotros dormimos en colchones que tienen entre 30 y 40 años, esperando hasta que se gasten.

Un colchón viejo puede traerte muchos problemas, por ejemplo, de espalda. Dormirás mal y te sentirás dolorido por la mañana. Además, aunque lo limpies regularmente, los ácaros igual vivirán en él. Cuanto más viejo sea el colchón, más polvo y ácaros acumulará. Estos “vecinos” podrían estar amenazando tu salud.

5. Lámpara brillante y araña debajo del techo

Una de las peores opciones es una araña instalada sobre la cama. La luz te dará directamente en los ojos, lo que es molesto y dificulta la relajación. Leer mientras estás acostado en la cama también puede ser incómodo. La iluminación ideal para el dormitorio son dos lámparas en las mesitas de luz, que no deben dirigirse hacia la cama, sino hacia un costado para que la luz se disperse.

6. Televisor

La mayoría de nosotros tenemos un televisor en el dormitorio. Esto nos permite ver nuestras películas y programas de televisión favoritos antes de acostarnos. Sin embargo, el televisor encendido es malo para la calidad del sueño. De hecho, simplemente estás ahuyentando el sueño de tu dormitorio cuando usas dispositivos electrónicos justo antes de quedarte dormido.

Si no tienes la posibilidad de mover el televisor a otra habitación, al menos no lo enciendas por la noche.

7. Cortinas finas o de tul

La mejor opción para el dormitorio son las cortinas pesadas que cubren completamente la ventana. Las cortinas finas o de tul no son adecuadas porque dejan entrar la luz; será más difícil conciliar el sueño. Especialmente si te gusta tomar una siesta.

Es importante no olvidarse de la ubicación de las cortinas. Cuanto más arriba estén, mejor. Si las cortinas no están colgadas directamente debajo del techo, el espacio se achica visualmente y las paredes parecen más bajas.

8. Alfombra colocada incorrectamente

Los diseñadores tienen esta regla: una alfombra grande debe colocarse directamente debajo de la cama y, al mismo tiempo, 45-60 cm deben sobresalir de ella. Ni más ni menos. La idea básica es que cuando te levantes de la cama, siempre pongas los pies en la alfombra y no en el suelo frío.

Una alternativa a una alfombra grande son dos alfombras de pasillo pequeñas a cada lado de la cama.

9. Ropa de cama de tela de alta densidad

Si deseas ahorrar, no gastes dinero en ropa de cama de telas de alta densidad. Si ves sábanas con TC (“thread count” — “número de hilos”, un criterio generalmente aceptado para designar la densidad de la tela) por encima de 1000, debes saber:

La calidad de las prendas no será mejor, simplemente pagarás de más. El hecho es que el hilo de la tela puede ser simple o estar formado por hilos retorcidos (hay dobles, triples, etc.). Es posible que algunos fabricantes no cuenten el número de TC, sino el número de hilos trenzados en uno. Como resultado, el precio de dicho producto aumenta drásticamente, pero la calidad no cambia.

10. Fundas de almohada con bordados

El bordado, sin duda, luce hermoso. Sin embargo, su textura es desigual e irrita la piel, lo que dificulta el sueño. Además, es casi seguro que por la mañana te despertarás con la marca de los estampados bordados en tu rostro.

11. Accesorios perfectamente combinados

Cuando todos los muebles se compran en una sola tienda, son de un mismo fabricante o tienen el mismo diseño, esto indica falta de gusto en su propietario.

12. Cama muy baja

Cuanto más alta sea tu cama, más seguro te sentirás. Además, a diferencia de las camas bajas, en las camas altas tendrás suficiente espacio debajo como para ubicar un par de cajones que, por ejemplo, pueden guardar ropa de cama o acolchados.

13. Cama sin cabecera

Según los diseñadores, una cama sin cabecera es casi lo mismo que una ventana sin marco. Su ausencia hace que el dormitorio se vea sin acabar.

14. Un cubrecama o manta que llega al suelo

Un cubrecama o manta de gran tamaño no hace destacar la habitación, sino que, por el contrario, simplemente la desordena y la hace ver desaliñada. Además, no es agradable cubrirse con una manta que estaba en el suelo hace 5 minutos.

Si quieres darle personalidad, es mejor hacerlo a través del color. Si las paredes del dormitorio son de un solo tono, sin patrones, elige sábanas y cubrecamas estampados. Si ya hay algunos patrones en las paredes, es mejor limitar tu elección de ropa de cama a paletas simples.

¿Qué errores en el diseño del dormitorio destacarías?

Imagen de portada depositphotos, depositphotos

Comentarios

Recibir notificaciones

Lecturas relacionadas